Valledupar, 30 de agosto de 2020.- Militares de la Reserva del Ejército, indignados por el recrudecimiento de la violencia en Colombia, afirman que esta es generada por las FARC, el ELN y otros grupos dedicados al narcotrafico y al terrorismo debido a la negación de los recursos suficientes para operar.
Los militares responsabilizan directamente al general retirado Alberto José Mejía Ferrero y al expresidente Juan Manuel Santos Calderón. Aseguran que es “su culpa por el manejo del pacto de la Habana y la entrega del Estado a manos de los bandidos de las Farc”.
Por lo anterior le exigen al gobierno nacional, a la Justicia, a la Fiscalía, a la Comisión de Acusación, al Congreso contemplar la apertura de una investigación penal por Traición a la Patria, argumentan que la conducta de estos dos, se tipifica como una traición a la patria, por lo que deben ser procesados por el anterior delito.
Señalan textualmente que “el arquitecto del debilitamiento de nuestro Ejército en su estructura organizacional, en la instrucción y en las operaciones, es el general retirado José Alberto Mejía Ferrero con los nuevos cambios implementados en la doctrina y protocolos para combatir a los terroristas en su plan maquiavélico que consistía en acabar o desmantelar los 150 batallones de contra guerrillas y las 26 brigadas móviles, unidades elites con soldados profesionales y con los mejores oficiales y suboficiales de nuestro Ejército dedicados exclusivamente a combatir las estructuras armadas y organizadas al servicio del narcotráfico”. Incluso aseguran que los Estados Unidos tendría competencia en la anterior denuncia teniendo en cuenta que el narcotrafico afecta a los ciudadanos estadounidenses que se han visto invadidos por el flagelo de la droga que sale de Colombia.
“A raíz del cruel y cobarde asesinato del Mayor Camilo Andrés Vergara las reservas activas, reservistas y los patriotas aseguran que se encuentran indignados por la doble moral del sistema político, legislativo, y judicial quienes quieren mostrar a los victimarios como verdaderas víctimas”. “Nosotros los héroes que combatimos con honor gallardía y valentía el crimen transnacional diseñado por la izquierda internacional ahora nos catalogan como los victimarios, es una injusticia ante Dios, ante la patria y ante el pueblo Colombiano”, argumentan.
Manifiestan sentirse “desmoralizados y sin garantías por todos los entes del Estado que están carcomidos por la ideología marxista, leninista que consiste en aplicar una dictadura socialista en nombre de la “PAZ” en Colombia con los partidos alcahuetes y procomunistas como el POLO, FARC, UP, VERDE, ASI, entre otros”.
Denuncian que las anteriorres organizaciones políticas “buscan destruir el sistema político administrativo y colombianos y convertir la democracia en una desgracia continental”.
Advierten finalmente que “nosotros los héroes del ayer y hoy defensores de la democracia, vamos a recuperar a Colombia porque nos pertenece y no vamos a dejar que destruyan nuestro país”. Y hacen un llamado “a las reservas, reservistas patriotas a unirse en estos momentos tan difíciles de un estado fallido por culpa de Comunismo enquistado”.