GOBIERNO

Barranquilla, 25 de septiembre de 2018.- En desarrollo de una agenda por los Estados Unidos alrededor de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Presidente Iván Duque durante su participación en la ‘Cumbre de Paz Nelson Mandela’, realizada este lunes como parte de los eventos paralelos, insistió en lo que el califica como el legado de Mandela que según dijo “consiste en ser capaz de situarse por encima de los odios”, porque según sus propias palabras, Mandela le ha hecho entender que a pesar de las diferencias, “son más importantes las cosas que unen a las personas”.

En su primera intervención en el marco de esta Asamblea número 73, el Jefe de Estado citó las palabras del líder sudafricano según las cuales ha “acariciado el ideal de una sociedad democrática y libre, en la que todos vivan en armonía y con igualdad de oportunidades”.

Afirmó que “Trabajamos arduamente en Colombia para hacer realidad ese ideal, el de ser un país unido que construya la paz con legalidad”, agregó el Presidente Duque.

Durante la citada conmemoración del centenario del nacimiento de Nelson Mandela, el Mandatario afirmó que su Gobierno entiende muy bien “cómo el deporte y la cultura tienen el poder de unir todas las razas, todas las clases, bajo una misma bandera”, según su propia concepción las cuales expuso y la Casa de Nariño, lo plasma en un comunicado de prensa.

Añadió además que Mandela “inspira una sociedad sin exclusiones y sin odios, con fraternidad y con grandeza”.

Agregó que la resiliencia, característica de ‘Madiva’, es también una virtud del pueblo colombiano, la cual se ha visto reflejada, por ejemplo, en la capacidad para enfrentar la violencia, ir derrotando la pobreza extrema y también para recibir con los brazos abiertos a “un millón de hermanos venezolanos que huyen de una terrible dictadura”.

En su discurso, el Jefe de Estado calificó a Nelson Mandela como un líder “virtuoso, íntegro y valiente”, y manifestó que también es “un inspirador que trasciende latitudes y generaciones, porque combinó lo que muy pocos pueden alcanzar: ser hombre ícono, prisionero y presidente, luchador y reconciliador”.

“Esta Cumbre de Paz es una oportunidad para transmitir a las nuevas generaciones lo que su vida simbolizó: la lucha constante para que ningún ser humano fuera amo de otro, pero tampoco que ningún ser humano fuera esclavo de otro”, puntualizó el Jefe de Estado.