Valledupar, 11 de diciembre de 2016.- Desde su casa de Rionegro, en el departamento de Antioquia, el Ex Presidente, Álvaro Uribe Vélez, reclamó la tendencia del presidente Juan Manuel Santos, a justificar sus errores con el cuento: “es que Uribe también lo hizo”.
Afirmó el Ex Mandatario colombianos, que no solo se trata del Presidente Juan Manuel Santos, sino de otras personas y en muchos ocasiones. Al igual que continúa reclamando que según sus propias palabras, hayan personas contratadas por el Gobierno, que en muchos artículos escriban para los medios de comunicación lo que les dictan desde la Presidencia de la República.
Afirmó igualmente Uribe Vélez que acusa que su discurso sobre el balance entre Paz y Justicia, pronunciado en la ONU en 2003, es contrario a lo que hoy expresa, nada más inexacto, reafirmó.
De acuerdo a lo expresado, Uribe recuerda que lo que ha pedido es amnistía para los guerrilleros de base y sentencias reducidas para cabecillas responsables de delitos de lesa humanidad. Seguidamente afirmó que esto es coherente con el discurso del 2003 en la ONU. Incluso, afirma Uribe que tampoco es contradictorio.
Afirmó igualmente que en aras de facilitar acuerdos de paz, sugirió colonias agrícolas pero con condiciones de reclusión penitenciaria, que el Gobierno no consideró. Al igual que consideró más conveniente, por lo que sugirió que la elegibilidad se condicione al previo cumplimiento de la pena.
Aclaró también Uribe que “nunca lograron que el Gobierno entendiera que el llamado al Pacto Nacional sobre la Paz, llevaba la oferta de la búsqueda compartida de opciones”.
“La respuesta del Presidente, manida y apurada, es que yo ayudé en lo del M19 y en estos tiempos me opongo al acuerdo con Farc”: Uribe.
Uribe se remontó a las épocas de su primer periodo como parlamentario, cuando en el Congreso, luego de la Constitución de 1991, solicitó en público “como suelo hacerlo, en la plenaria del Senado”, que cumplieran lo acordado con el M19, a raíz de la noticia por aquellos días, de reapertura de causa judicial contra sus integrantes, habiéndose acordado “la paz” con esa organización guerrillera. Afirmó que sus miembros habían entregado las armas, pedido perdón, habían recibido el beneficio del indulto, habían estado en el gabinete ministerial, participaron con la tercera parte de la Constituyente de 1991 y se encontraban en ese Congreso en el año 1992. Por lo que consideró grave que se hiciera ese cambio judicial no obstante que nada tuvo que ver con los acuerdos. No existía el limitante de la Corte Penal, enfatizó .
“Confieso que no sé si me equivoqué o acerté, pero lo hice abiertamente, de cara al país, de buena fe”: Uribe
Argumentó igualmente que desmovilizados de varios grupos trabajaron con él, en la Gobernación de Antioquia y en la Presidencia de la República. Igualmente se refirió a los cuestionamientos por la elección del hoy senador Everth Bustamante, quien llegó al senado en la lista de Uribe, pero recordó que también fue colaborador de su Gobierno, y nunca responsable de delitos atroces.
“Lo cierto es que la impunidad total, que es contraria al balance entre Paz y Justicia, ha sido creadora de más violencia en Colombia, y en el futuro tiene serios riesgos jurídicos”, aseguró.
“Y pensando en el futuro del país he sido incapaz de aceptar impunidad total para las atrocidades de Farc”: puntualizó Uribe.
Recordó el Ex presidente que “en 1991 se les dijo que con esos procesos de paz se cerraba el ciclo de política armada en Colombia, que en adelante los grupos que lo intentaran serían tratados como terroristas. Aseguró que son los mismos actores oficiales, que expresaron eso en aquella época, en la actualidad califican al terrorismo de Farc como política con armas. Expresan que en 2016 es cuando se cierra el ciclo”.
“Así las cosas ¡qué podemos esperar que les escuchemos en el futuro sobre disidentes de Farc, Eln, bandas criminales y otros”!
“He repetido que las discusiones sobre ventajas electorales a delincuentes, que de manera pública permití en mi Gobierno, fueron simplemente eso, discusiones, que jamás cambié las restricciones de elegibilidad. Y he agregado que de no aceptar lo que tantas veces he explicado, tomen aquellas declaraciones como errores míos y no los repitan”.
“Cada vez que este Gobierno me asigna un error, mi esperanza de que lo corrijan se torna en la tristeza de que lo usan para justificar su repetición”.
No obstante lo anterior, reclamó que se les haya olvidado repetir la seguridad democrática, la lucha contra el narcoterrorismo, la confianza inversionista, la cohesión social, la austeridad, el diálogo afectuoso con la base popular de la Nación.
“Escribo estas líneas con la angustia democrática de temer al Fast Track, sin el plebiscito que el Gobierno perdió y después eludió, todo en beneficio del terrorismo, con anulación de debates y de procedimientos democráticos, como en nombre de la paz lo han hecho las dictaduras”.
Recordó que las escuelas democráticas de derecho enseñan que las normas jurídicas son para someter al poder, no para que el poder someta a las libertades, nunca para ayudar a los abusos del poder.
Finalmente aseguró haber escuchado a muchos colombianos declarar que están fatigados, que quieren aceptar todo a regañadientes. Pero recordó que “los dirigentes políticos no pueden renunciar a las nuevas y duras tareas, es un compromiso con la ciudadanía. Cuidado: la fatiga de los dirigentes es la rendición de los principios, advirtió para concluir”.