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Las leyes de los talibanes, estarían siendo más sensibles con las mujeres, que las leyes Covid del globalismo en otros países

Barranquilla, 29 de enero de 2022.- Una periodista neozelandesa embarazada identificada como Charlotte Bellis se vio obligada a recurrir a los talibanes en busca de ayuda después de quedar varada en Afganistán debido a las draconianas leyes de covid de Jacinda Ardern, publicó este sábado el Daily mail del Reino Unido

Señala el medio que la Señora Bellis que se encuentra en Afganistán ha presentado 59 documentos a los funcionarios de Nueva Zelanda en Afganistán en un intento de asegurar un regreso de emergencia a casa, pero todos han sido rechazados.

Recurrió a los talibanes en busca de ayuda después de no poder regresar a su tierra natal debido a las draconianas restricciones de Covid de Jacinda Ardern.

Escribiendo en el New Zealand Herald el sábado, la señora Bellis dijo que era “brutalmente irónico” que, si bien una vez cuestionó a los talibanes sobre su trato a las mujeres, ahora estaba haciendo las mismas preguntas a su propio gobierno.

La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, se aisló a sí misma después de entrar en contacto cercano con una persona infectada con el coronavirus.

La exposición se produjo en un vuelo desde la ciudad de Kerikeri a la ciudad más grande de Auckland . La gobernadora general de Nueva Zelanda, Cindy Kiro, también estaba en el vuelo del 22 de enero y también se aisló.

Ambas mujeres habían estado en la región de Northland para filmar antes del día nacional de Nueva Zelanda, el Día de Waitangi, el 6 de febrero.

“La primera ministra está asintomática y se siente bien”, dijo su oficina en un comunicado. “De acuerdo con los consejos del Ministerio de Salud, se le hará la prueba inmediatamente mañana y se aislará hasta el martes”.

Charlotte Bellis, una periodista televisiva, dijo que ha intentado regresar a Nueva Zelanda en repetidas ocasiones desde que se enteró de que estaba embarazada en septiembre.

Ha presentado 59 documentos a los funcionarios de Nueva Zelanda en Afganistán en un intento de asegurar un regreso de emergencia a casa, pero su oferta fue rechazada y la llevó a volverse hacia los talibanes, uno de los regímenes más opresivos del mundo, en busca de simpatía.

Es un giro del destino particularmente cruel para la mujer que fue reverenciada en todo el mundo por su intrépido cuestionamiento del historial anterior del grupo yihadista sobre los derechos de las mujeres.

Para colmo de males, Bellis ha advertido que el embarazo puede ser una sentencia de muerte en el Afganistán controlado por los talibanes debido al mal estado de la atención de maternidad y la falta de capacidades quirúrgicas.

En declaraciones a 1News sobre su situación, Bellis preguntó: ‘Al gobierno de Nueva Zelanda, le pregunto qué quiere que haga. No he hecho nada malo, me quedé embarazada y soy neozelandesa.

“¿En qué momento nos empantanamos tanto en estas reglas que hemos ideado que no podemos ver que ella es una Kiwi que necesita ayuda y necesita volver a casa?”

Aunque la propagación de Covid-19 ha sido limitada en Nueva Zelanda y solo se han reportado 52 muertes desde el comienzo de la pandemia, la nación aún requiere que los ciudadanos pasen 10 días en hoteles de aislamiento administrados por militares.

La política de ‘cero Covid’ ha sido criticada repetidamente y las estrictas restricciones de autoaislamiento ahora han causado una acumulación de miles de personas desesperadas por regresar a casa.

Bellis se ha convertido en una de las kiwis de más alto perfil en ser víctima de los controles fronterizos extremos de Nueva Zelanda, ya que la primera ministra Jacinda Ardern y su gobierno enfrentan más vergüenza por sus propias políticas.