Era de suponerse que el guerrillero Gustavo Petro Urrego no hubiera criado a su hijo. Y a qué horas? Si para él era mejor estar metido en el terrorismo, de carcelero de los secuestrados, y de todos los delitos que para nadie es un secreto que cometen los grupos terroristas, que cumplir con su responsabilidad de criar a su hijo.
Pero el no haber vivido en la misma casa con su hijo, eso a usted Gustavo Petro, no lo exime de responsabilidades, no criarlo indica de antemano la clase de irresponsable que es usted.
Sin embargo su hijo es su sombra, porque el hijo abandonado siempre tiene ese anhelo por el amor del padre, y siempre va a querer parecerse a él, así sienta que este no lo quiere.
Y querer imitarlo a usted, fue muy fácil para Nicolás porque su vida delictiva en la guerrilla siempre estuvo a la vista, ha sido de conocimiento público, por un lado. Pero por otra parte, “hay un espacio en los hijos a diferentes edades que si no se llenan a tiempo o si no se llenan nunca queda ese vacío que no puede llenar más nadie, por eso existe padre y madre, cada uno tiene un espacio afectivo que llenar en los hijos. El afecto de la madre no reemplazará nunca el de la figura masculina del padre. Y el afecto del abuelo, por mucho que lo ame y haya compenetración tampoco va a reemplazar el del padre. Algunos niños y adolescentes pasan de largo en esas falencias, muchos no las sienten, pero hay otros con más sueños del afecto paternal que nunca les llegó a tiempo. De adultos muchos se convierten en personas inmaduras, inseguras”, concepto de la psicología.
Debe quedarle claro señor Petro, los resultados de su abandono a su hijo, es su entera culpa por todo, justo por haberlo abandonado! No era suficiente con hacerse acompañar de él en una manifestación pública como él mismo lo dice en una entrevista con Edgard García Ochoa. Tampoco era suficiente con los escasos raticos que le dio.
Ahora le toca asumir su responsabilidad, porque además según lo afirma el mismo Nicolás en esa entrevista con Edgard García Ochoa, usted Petro lo puso a cargarle la maleta como todo político, pero usted lo hizo con su propio hijo, y cuando ya lo vio grandecito que le podía servir, lo puso a coordinar su campaña en la Costa, especialmente en el Atlántico.
“Crecí al lado de eso, he crecido siempre con mi papá y he estado con él en sus luchas políticas en todas las campañas siempre al lado de él, en las tarimas organizando”. Se refiere Nicolás Petro al crecimiento político, esto es, que su padre es su espejo político en el cual se mira. Esto deja claro que lo seguía así no estuviera con él en la misma casa. Y hacía solo un año, para la fecha de la entrevista afirmó que “fue el responsable de la campaña Petro Presidente en el Caribe, sobre todo en Barranquilla y en al Atlántico haciendo los recorridos, los casa a casa, y también contactándose con los aportantes a la campaña que aunque no lo dijera en la entrevista, si está claro que Petro lo encargó para solucionar una situación con un reconocido empresario de Barranquilla.
Usted Gustavo Petro, prefirió estar delinquiendo con la guerrilla que criar a su hijo.
Usted Gustavo Petro nunca solucionó ni dio una respuesta convincente sobre las bolsas negras con fajos de billete que todo el mundo vio. Esto también lo vio su hijo, y por supuesto, “si mi papá lo hace, yo también lo hago”, y por supuesto “si a mi papá no le pasó nada a mi tampoco”.
Nicolás es la respuesta a su impunidad que ha sido de conocimiento público, no sea irresponsable, no escurra el bulto intentando ahora culpar a la madre y a los abuelos, personas honradas, decentes que le hicieron el favor de suplir su responsabilidad. No sea Canalla!
2 Responses
Estimado Presidente, no tiene salida, cada palabra suya lo atolla más. El bebé aprendió bién la lección, lo que se hereda no se hurta.Le va mejor calladito.
La paternidad es una responsabilidad de por vida señor Petro
La paternidad es una responsabilidad de por vida, y esta es una lección que muchos hombres aún no han aprendido. En el caso del político colombiano Gustavo Petro, su actitud frente a las acusaciones contra su hijo ha dejado al descubierto su falta de compromiso y responsabilidad paterna.
A pesar de que la maternidad es una experiencia de lucha constante por brindarles a sus hijos todo lo que necesitan, tanto emocional como económicamente, la que es mayor, ante el reto sin la ayuda de un padre presente. Sin embargo, lo que hace a un padre es mucho más que proporcionar el sustento económico, es una responsabilidad que va más allá del dinero. Los padres tienen la obligación de estar presentes y comprometidos en la vida de sus hijos, incluso cuando ya no están juntos con la madre.
En Colombia, el DANE proporcionó datos en las encuestas del 2020 sobre hogares cuya jefatura es femenina, indicando la importancia de abordar y discutir temas relacionados con la crianza de los hijos en solitario y la necesidad de apoyo y solidaridad para enfrentan este desafío en la vida cotidiana. Esta herramienta permitió observar un aumento en el reflejo de la desigualdad de género en la sociedad, donde las mujeres son tradicionalmente vistas como las únicas responsables de la crianza de los hijos. Generando una carga desproporcionada para las madres que deben hacer frente a la crianza en solitario, sin la ayuda y apoyo de los padres.
Situación apreciable en el caso de Presidente Gustavo Petro, su actitud frente a las acusaciones contra su hijo ha demostrado una clara falta de responsabilidad paterna. La salida en falso “yo no lo crie”, simplemente evade su responsabilidad una vez más. Olvida nuevamente su rol, los padres tienen la responsabilidad de estar presentes y apoyar a sus hijos en todas las etapas de sus vidas, incluso cuando enfrentan dificultades en la adultez. Negar la responsabilidad paterna en estos momentos no sólo es un acto de cobardía, sino también de irresponsabilidad, deslealtad. La paternidad es una responsabilidad de por vida, y no se puede lavar las manos ante las dificultades que enfrentan los hijos.
La Señora Katia Burgos, Madre de Nicolas crio a su hijo sola y merecen total respeto y apoyo, es hora señor Gustavo Petro que asuman su responsabilidad, negarla no sólo es injusto para su hijo, sino también refleja la desigualdad de género que usted alimenta y su fatal fracaso como padre.
Hoy, considero sorprendente y preocupante que este comportamiento no genere un eco social significativo, y que no se discuta ni se cuestione la falta de ética de Petro. Parece que la sociedad todavía tiene un largo camino por recorrer en cuanto al tipo de vara que utilizan para medir el actuar de otros. Es hora de que las feministas y todos aquellos que luchan por la igualdad de género denuncien estas actitudes injustificables e inaceptables. La sociedad necesita escuchar la voz de las mujeres y de aquellos que se preocupan por el bienestar de los hijos, para que se hagan cambios significativos en la forma en que se aborda la paternidad en la sociedad actual.