CONGRESO, ECONOMICAS

Más de 35.000 empresas y organizaciones instan al Congreso a impulsar una reforma laboral moderna e incluyente, que fomente el emprendimiento y la formalización. Advierten que mantener la informalidad solo perpetúa la desigualdad y la violencia en Colombia.

Valledupar, 20 de mayo de 2025.- A través de un comunicado de prensa, la Mesa de Productividad y Empleo, integrada por 35 agremiaciones, sindicatos y organizaciones sociales que representan a más de 35.000 empresas de todos los tamaños, instó al Congreso de la República a replantear la reforma laboral con una visión actualizada y acorde a la realidad nacional.

El llamado fue hecho durante una sesión de la Comisión Cuarta del Senado, donde el vocero Cristian Halaby advirtió sobre la necesidad de una legislación que no deje por fuera a los emprendedores y evite la informalidad.

“Colombia necesita con urgencia una reforma laboral que no excluya, que no castigue el emprendimiento y que no condene a la informalidad a más del 50% de su fuerza laboral. No se trata solo de una apuesta de poderes, se trata de definir el futuro del trabajo en Colombia”, afirmó Cristian Halaby.

En ese contexto, la Mesa presentó dos propuestas centrales, surgidas del diálogo con emprendedores, trabajadores informales y expertos. La primera es la creación de un Régimen de Formalización Progresiva para Trabajadores por Cuenta Propia y Emprendedores de la Economía Popular.

Esta estrategia propone un tránsito gradual hacia la formalidad, mediante incentivos tributarios y acceso escalonado a la seguridad social, orientado a millones de colombianos que hoy laboran fuera del sistema.

La segunda iniciativa consiste en un Régimen Simplificado para la Creación y Formalización de Microempresas y el Fomento a la Economía Popular. Este marco normativo busca facilitar la constitución de pequeñas empresas y promover la contratación de jóvenes, mujeres y personas en proceso de reincorporación, a través de incentivos concretos.

Ambas propuestas responden a una demanda de largo plazo: reglas claras, una carga tributaria justa y condiciones que transformen el emprendimiento y la formalización en oportunidades reales.

La Mesa de Productividad subrayó que legislar ignorando el contexto actual solo perpetúa la exclusión y la violencia. Sobre este aspecto, Halaby enfatizó que, cuando el trabajo formal es un privilegio y no un derecho, se limita la educación, se frena el emprendimiento y se favorecen escenarios de conflicto. Recordó que la informalidad ha sido históricamente un terreno fértil para la violencia y que formalizar es también reconciliar.

Finalmente, la Mesa agradeció el espacio de diálogo abierto por la Comisión Cuarta del Senado y reiteró su compromiso con una reforma laboral construida colectivamente, orientada al consenso y al interés común del país.

“No legislemos de espaldas al país. Hagamos historia. El poder ciudadano puede transformar Colombia. Pero el Congreso tiene hoy la oportunidad de marcar un antes y un después. Le quiero decir al gobierno, este era el gobierno del cambio, pues qué bueno que fuera el gobierno del cambio para bien”, apremió el dirigente gremial.