AGRONOTAS

Valledupar, 26 de septiembre de 2019.- El Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, se unió a la celebración del Día Mundial contra la Rabia, a través de una jornada académica que se realizó en el municipio de Chinú, Córdoba, con el fin de concientizar a los productores pecuarios sobre la prevención y la importancia de vacunar a los animales contra esta enfermedad.

En esta zona del país se reportó la presencia de la rabia de origen silvestre en especies equina y bovina. Esta es una enfermedad zoonótica que es transmitida por murciélagos hematófagos, y que pone en riesgo no solo la salud de los animales, sino también la de los seres humanos.

El lema para este año del Día Mundial contra la Rabia es ‘Vacunar para eliminar’, destacando la vacunación de los animales como un método ideal para controlar y eliminar la enfermedad, en este caso la rabia de origen silvestre, siendo el único método para romper el ciclo de transmisión del virus desde el animal hacia el hombre.

“Desde el ICA continuamos haciendo el control de la enfermedad, haciendo vigilancia epidemiológica, toma de muestras y control de vectores transmisores de rabia, de acuerdo con los reportes que los productores hacen al observar mordeduras de murciélagos hematófagos en sus animales”, explicó el gerente seccional (e) del ICA, René Herazo Cueto.

La jornada académica, que contó con la asistencia de más de 50 productores de la región, se llevó a cabo luego de un trabajo articulado entre el ICA, la Secretaría de Salud de Córdoba y la Alcaldía de Chinú, para prevenir y controlar la enfermedad, resaltado que la ausencia de la rabia en los animales conlleva a una eliminación casi total de los casos de rabia en los humanos.

“Esta es una enfermedad de control y se previene por medio de la vacunación, la cual depende directamente de la participación del productor para tener una buena cobertura y mantener protegida la población animal”, acotó Herazo Cueto.

El ICA aprovechó este espacio para reiterar a los productores pecuarios sobre la importancia de reportar los síntomas de alarma que pueden presentar los animales como caídas, salivación abundante, ceguera, temblores musculares, parálisis, entre otros. Esto con el fin de tomar acciones de control inmediatas que permitan evitar la diseminación de la rabia de origen silvestre por el país.