JUDICIALES

Valledupar, 2 de septiembre de 2019.- Al principio se creyó que el tema no pasaría de una retención o secuestro momentáneo a raíz de que Karina García Sierra aspirante a la alcaldía del municipio de Suárez, Cauca, se encontraba desaparecida, pero no demoró la supuesta retención cuando después de varias horas se conoció que había sido asesinada en el norte del departamento del Cauca, en zona rural a 40 minutos del municipio de Suárez.

Karina García aspiraba elegirse Alcalde por el partido Liberal, pero fue masacrada junto con su propia madre y los acompañantes, en total 7 personas a quienes primero arremetieron bala desde afuera contra la camioneta de la UNP en la que se movilizaban y hacían correrías de campaña, y seguidamente fueron asesinados con disparos de fusil. La camioneta incinerada con todo y los cuerpos dentro del vehículo los cuales quedaron calcinados, y esta tarde un grupo de fiscales especializados hizo el levante de los mismos.

La candidata había salido de la vereda el Naranjal del corregimiento Betulia, y en la vía en una curva según explicó el escolta de la UNP que resultó ileso había un carro atravesado que les impidió el paso, intentó retroceder pero fue infructuoso. El escolta resultó herido y es atendido en una clínica de Cali.

La candidata había denunciado el peligro que corría y las amenazas en un video que publicó en su cuenta de tuitter en el que Karina García, también había denunciado ataques a su candidatura por parte de personas que la acusaban haciéndola vulnerable exponiendola ante los grupos armados, de los cuales también recibió amenazas.

Las personas asesinadas fueron identificadas como Blanca Otilia García, la madre de la candidata, Aidee Trocha, David Ramos, Héctor González de la mesa de Víctimas y Jeison Obando un candidato al Concejo.

Karina García había denunciado amenazas contra su vida y se movilizaba en una camioneta de la UNP, junto con un escolta que le fue asignado afirmó que los atacaron con granadas de mano. Señaló que los disparos de fusil penetraron el blindaje de la camioneta.

Este lunes en un Consejo de Seguridad en Popayán presidido por el Ministerio de la Defensa, Guillermo Botero, afirmó que los asesinos que participaron en la masacre son miembros de la columna disidente de las Farc, Jaime Martínez, y Dagoberto Ramos, ofreció una recompensa de 50 millones por alias Magnum, y 100 millones de pesos por alias Mayimbú comandante de esa cuadrilla conocida, según afirmó el Mindefensa.

El Comisionado de Paz, Miguel Ceballos condenó todos estos asesinatos, y la presunta alianza que supuestamente se estaría dando con el ELN, alias Iván Márquez, y también responsabilizó a alias Mayimbú, y alias Magnum.