Barranquilla, 30 de enero de 2019.- La Fiscalía General de la Nación entregó este martes los resultados finales de la investigación por la muerte de Alejandro Pizano Ponce De León, que fueron llevadas a cabo por parte de la Fiscal de conocimiento quien es encuentra adscrita a la seccional de Cundinamarca.
El Fiscal General Néstor Humberto Martínez, afirmó que el 11 de diciembre de 2018, Alejandro Pizano bebió de la botella saborizada, que posteriormente fue entregada por la misma familia en el Centro de Salud El Rosal de Cundinamarca a donde fue llevado de emergencia. La botella marcó el inicio de la investigación con la que se dictaminó por parte de los peritos investigadores las causas de su fallecimiento.
La Fiscal de conocimiento estableció que Jorge Enrique Pizano el padre, tuvo control de la botella de agua saborizada que compró desde el 14 de octubre en Subachoque Cundinamarca, así lo registró en video de las cámaras de vigilancia.
Así mismo señaló que el personal doméstico afirmó que efectivamente la botella fue llevada a la Finca en Subachoque, al igual que certificó el centro de comercio la venta de las botellas de agua a Jorge Pizano.
Otra prueba científica que reafirma el control de la botella de agua saborizada tiene que ver con el resultado de la prueba con el punto de vista del ADN, practicada al envase, expresa que en el pico de la botella se encontraron marcas de cromosomas heredadas.
Alejandro Pizano tiene el mismo cromosoma de su padre identificando el linaje de padre a hijo. Indica la prueba que hubo contacto del padre con la botella. Así mismo como prueba del hecho, esta la declaración de una asistente doméstica que observó a Jorge Enrique Pizano el 7 de noviembre, un día antes de su fallecimiento acercarse a la cocina sacar una cuchara de palo, llevando la botella en la mano y se encerró en el baño del segundo piso donde fue encontrado el tarro de cianuro.
Pizano además había manifestado a diferentes personas, que planeaba usar un elemento toxico, así también lo manifestó su psiquiatra. También había dejado documentos escritos, una carta dirigida a su familia en la que dejaba a su circulo familiar intimo tareas por hacer precisando 11 actividades pendientes, además de detalles bancarios y escrituras, pasaportes, incluso en los temas de su pensión, etc.
La mujer que atendía el aseo aseguró que el 8 de noviembre vio sobre el escritorio la botella medio tapada y se acercó a taparla, en ese momento vio en el piso una hoja la que levantó y leyó, por la importancia le tomó una fotografía que remitió a otra domestica. La declaración de esta doméstica da detalles sobre como se desarrollaron las cosas.
Señaló además que la Finca nunca fue visitada por nadie los tres días después del infarto de Pizano, sino hasta el 11 de noviembre en que la familia hizo una visita póstuma a la Finca. Los investigadores dan cuenta de acuerdo a esto que la botella permaneció en el lugar hasta el momento en que su hijo llegó junto con su familia. Las dos hermanas de Alejandro Pizano, la mamá, y su esposa. Alejandro Pizano tomó la botella en su mano y bebió de la botella, e inmediatamente se presentaron las circunstancias por las que fue llevado al Centro Hospitalario en El Rosal.
El resultado forense señala que la botella saborizada contenía el cianuro con el que Alejandro Pizano Ponce de León se intoxicó. La Fiscal dispuso el archivo del caso por atipicidad de la conducta ante la evidencia de que Alejandro Pizano de forma accidental al ingerir la bebida se intoxicó.
En el caso de la muerte de Jorge Enrique Pizano, el Fiscal Néstor Humberto Martínez, recordó que esta fue diagnosticada por la Clínica Fundación Santa Fe de Bogotá por el médico patólogo Pedro Morales, quien indicó que habría fallecido por muerte súbita de origen cardiovascular causada por estrés físico, pánico o miedo. El Fiscal pidió respeto por el caso y no revictimizar a su familia.