COLUMNISTAS, ECONOMICAS

El año anterior se aprobó la denominada Ley de Financiamiento que sentó las bases para la recuperación económica del país ofreciendo una serie de beneficios tributarios para las empresas especialmente, buscando generar las condiciones para el crecimiento del país y recuperarlo de la complicada situación heredada del gobierno Santos.

Implementada a partir del primero de enero del año en curso alcanzando importantes resultados en materia económica para el país que fueron bien valoradas por muchos incluidas las calificadoras de riesgo que mantuvieran la expectativa positiva sobre las posibilidades macroeconómica del país. Lastimosamente hace algunas semanas la Corte Constitucional (la que dejó Juan Manuel Santos y que tantos réditos dejó para el beneficio de criminales como avalar acuerdo con Farc, prohibir la fumigación aérea, narcotráfico como delito conexo al político, etc.) tumbó la ley de financiamiento obligando al gobierno el presidente Duque a presentar nuevamente un proyecto de ley que busca que los principales aspectos de la ley anterior se mantengan (el mensaje gobierno es que se trata del mismo articulado que tantos beneficios ha presentado para el país). La medida contó con el respaldo del Consejo Gremial quienes lo han considerado como muy positivo para el país.

Dentro de los principales aspectos contenidos en la Ley de Financiamiento tenemos la reducción del impuesto de renta del 33% al 32% en 2019, al 30% en 2022; descontar el impuesto a las ventas por quienes realicen inversiones de capital; descontar del impuesto de renta inicialmente el 50% el impuesto de Industria y Comercio, para 2022 el 100%; eliminar la renta presuntiva en 2021. Es claro que esta serie de beneficios empezaron a reflejar resultados muy positivos para el país, como lo reconocen especialmente las Calificadoras de Riesgo y los inversionistas extranjeros.

Dicha ley ha contribuido a que la economía colombiana tenga expectativa de crecimiento del 3,4% para 2019 según el FMI, sin duda muy bueno comparado con otros países de América latina; adicionalmente la calificadora STANDAR & POOR´s mantuvo la calificación de riesgo al país al considerar que pese a la caída de la ley de financiamiento el mayor recaudo de impuestos aliviaba el efecto. También hay que destacar que la Inversión Extranjera Directa crece 24,4% a septiembre, crecimiento en la Industria (3,5%), el Comercio (4.8%) y el consumo de los hogares (7,8% a septiembre). Lo anterior aunado a una serie de medidas adoptadas por el gobierno para fomentar las industrias creativas, el emprendimiento, el desarrollo rural del país a través de los mecanismos novedosos, la construcción de vivienda de interés social otorgando un subsidio que se paga simultáneamente con el que ofrecen las Cajas de Compensación ( doble subsidio), el mayor dinamismo que tendrán las obras publicas con la entrada en labor de las obras 4 G ( que dejó abandonadas el gobierno anterior); brindan sin lugar a dudas posibilidades para que los resultados mejoren en lo que resta del año y en todo el 2020.

Reitero que estos resultados todavía están lejos de lo que el país necesita como ideal de crecimiento para lograr un verdadero desarrollo; pero no podemos olvidar que desastre de país recibió el Presidente Duque, tampoco desconocer que el país avanza en un proceso consolidado de recuperación económica, así lo entienden los inversionistas extranjeros y las calificadoras de riesgo que brindan importantes acciones de confianza y respaldo. Ante ese panorama se hace indispensable que el Congreso de la República entienda la responsabilidad que tienen y rápidamente aprueben la nueva Ley de Financiamiento, brindando un mensaje de respaldo a la economía nacional, a los empresarios y a todos los actores económicos y sociales del país; Colombia necesita esa ley.

EL COLMO 1: La desinformación y las mentiras son la forma con la que la izquierda ataca al gobierno y convoca a marchas. No es cierto que el gobierno este en proceso de presentar una reforma laboral para aumentar edad y aportes de pensión; menos reducir el salario para los jóvenes que ingresen a trabajar. NO HAY DERECHO.

EL COLMO 2: Según Rosario Córdoba, Presidente Consejo Privado de Competitividad, “Colombia se mantiene como el tercer país con mayor facilidad para hacer negocios”. Refiriéndose al informe Doing Business expresó: “Colombia perdió dos posiciones, pero ganó en calificación y eso es lo que mas nos compete”. Pero un “analista” se quedó solo con el titular y ocultó estas relevantes observaciones. NO HAY DERECHO.