Colombia ha pasado por muchas crisis, pero una crisis con tantas aristas como la actual, es difícil de encontrar igual o similar en la historia.
Una elección cuestionada, un apoyo popular en el 22%, un apoyo mínimo en las calles en las marchas, la gasolina subiendo, la economía bajando, escándalos internos, dineros sucios, inseguridad rampante, grupos terroristas retomando el control y fortalecidos, Fuerzas Armadas desmotivadas, capitales saliendo, inversión extranjera no entrando, reformas estancadas, división interna en el partido de gobierno, falta de apoyo de los otros partidos, desilusión de sus votantes, gobiernos vecinos influyendo en el propio gobierno, la coca acumulada por sobreproducción, una oposición popular activa e independiente, las reservas de las Fuerzas Armadas manifestándose contra el gobierno, etc, etc.
Dentro de todo este desorden hay algo que no cuadra.
¿Porqué el ELN que tiene su Vicepresidente en Francia Márquez no apoya a Petro facilitando los diálogos de paz?
¿Por qué las conversaciones no avanzan?
¿Por qué el silencio del partido de gobierno?
¿Por qué parece que sencillamente están “dejando que se joda todo” para presionar la salida de Petro?
¿Por qué la artillería de las denuncias de Benedetti solamente iba contra Petro y nunca contra Francia?
¿Por qué el silencio de Roy Barreras?
¿Será que lo que quiere el ELN y el partido de gobierno es que se vaya Petro para que quede Francia?
¿Será que es también lo que quiere la “caterva de descastados” para que todo siga igual que antes de Petro?
Para el ELN y el partido de gobierno sería un gran alivio la salida de Petro y para la “caterva de descastados” sería el sello final de una jugada maestra.
Francia Márquez puede ser mucho más fácilmente manipulada y su debilidad puede ser muy bien aprovechada por el ELN y la “caterva de descastados”.
A los únicos a los que no beneficiaría la salida solamente de Petro sería, paradójicamente, a los que queremos que nazca un partido nuevo y limpio para reemplazar a la “caterva de descastados”.
Colombianos, la salida solamente de Petro y la permanencia de Francia, sería un error estratégico histórico que cercenaba toda la inconformidad que está facilitando, por primera vez en la historia republicana, la creación de un partido nuevo y limpio.
No juguemos ese juego perverso.
Deben irse los dos.
Atención a mis palabras.
Deben irse los dos o sino habremos sido la generación más imbécil que mató la mejor oportunidad de salvar a Colombia.
Para su gentil reflexión, difusión y acción.