COSTA NOTICIAS

Proteína: tan nombrada como desconocida

La carne de res es la mayor fuente de proteína y su consumo es esencial para la vida, pero nuestro cuerpo no es capaz de producirla por sí mismo, por ello necesitamos ingerirla. Pero…,por qué?

“Podemos comer mucho, incluso ser obesos y estar desnutridos, o ser personas delgadas bien nutridas. Cantidad no es sinónimo de calidad”, dijo la presidenta del Colegio Colombiano de Nutricionistas Dietistas, Ana María Ángel.

Dado que las proteínas están formadas por cadenas de aminoácidos, cuando hablamos de que las necesitamos, en realidad nos estamos refiriendo a los aminoácidos que nuestro cuerpo requiere. sólo la proteína de origen animal los contiene todos. Por ello, las de los animales, son conocidas como proteínas de alto valor biológico.

Barranquilla, 15 de marzo de 2020.- Si preguntamos a cualquier persona qué le aporta la carne de res a su dieta, la respuesta que más escucharemos será una misma palabra: proteínas. Tal vez otras que han leído sobre temas de nutrición dirán que contiene riboflavina, niacina, tiamina, hierro, zinc y vitaminas A y C.

Sin embargo, es muy probable que si profundizamos no sean tantos los que puedan explicarnos qué son las proteínas, para qué sirven y, por ende, por qué todos las necesitamos en cada etapa de nuestra vida. ¿Qué tienen las proteínas que las hacen tan valiosas?

Nutrientes

Ana María Ángel, presidenta del Colegio Colombiano de Nutricionistas Dietistas (Colnud), considera importante hablar inicialmente de los nutrientes. “Podemos comer mucho, incluso ser obesos y estar desnutridos, o ser personas delgadas bien nutridas. Cantidad no es sinónimo de calidad”, dijo.

Y añadió que la clave reside en los nutrientes, “que se llaman así por ser la parte útil de los alimentos que consumimos, es decir, aquella que nos nutre y es verdaderamente necesaria para el correcto funcionamiento de nuestro organismo y por ende para la vida”.

Según la experta, los nutrientes se dividen en dos grandes grupos: los macronutrientes, que son tres: proteínas, glúcidos o carbohidratos, y lípidos o grasas; y los micronutrientes, que se subdividen en dos: vitaminas y minerales.

“Las proteínas se encuentran, entonces, entre el grupo de los macronutrientes, cuyo prefijo ‘macro’ hace referencia a que los necesitamos en grandes cantidades, o lo que es lo mismo, que su ingesta diaria y en la proporción necesaria es completamente esencial para nuestro organismo”, explica.

¿Qué son las proteínas?

Dado que las proteínas están formadas por cadenas de aminoácidos, cuando hablamos de que las necesitamos, en realidad nos estamos refiriendo a los aminoácidos que nuestro cuerpo requiere. De entre todos los aminoácidos existentes, hay 20 llamados proteinogénicos. Todos ellos son imprescindibles para la vida, pero 12 de ellos los auto-produce nuestro propio organismo.

Los ocho restantes (más un noveno durante la niñez: la histidina), se conocen como los aminoácidos esenciales. Es decir, a pesar de que los necesitamos para vivir, no somos capaces de producirlos por nosotros mismos y por ello necesitamos adquirirlos mediante la alimentación.

Estos aminoácidos esenciales están presentes —en distintas proporciones— en una gran variedad de alimentos tanto de origen vegetal como animal. Ahora bien, sólo la proteína de origen animal los contiene todos. Por ello, las de los animales, son conocidas como proteínas de alto valor biológico. Las proteínas vegetales, a su vez, se consideran como proteínas de bajo valor biológico pues pueden carecer de alguno o tenerlos en un porcentaje insuficiente. Para quienes llevan dietas vegetarianas y veganas se hace imprescindible, por tanto, la correcta combinación de distintos grupos de alimentos para no caer en un déficit proteico.

¿Por qué son esenciales?

Las cadenas de aminoácidos que conforman las proteínas dan el soporte y la estructura que nuestras células necesitan para formar tejidos (músculos, huesos, etc.), enzimas (que permiten las reacciones físicas del cuerpo), hormonas (como la insulina) e incluso anticuerpos y neurotransmisores. Es por esto que, como la misma FAO reconoce, las proteínas son la base para:

  • Construir los tejidos del cuerpo (músculos, sangre, piel, huesos, tendones, cartílagos, órganos), muy especialmente en los periodos de crecimiento.
  • Reparar dichos tejidos durante toda la vida. Algo que en determinados procesos es notorio a simple vista, como en el colágeno de la piel o la queratina de las uñas y el cabello.
  • Fortalecer el sistema inmunológico. Porque las proteínas cumplen también una labor de defensa y de generación de anticuerpos.
  • Asegurar el buen funcionamiento del organismo, ya que colaboran en la actividad de las células y en algunas hormonas como la insulina.
  • Transportar el oxígeno y otras funciones de neurotransmisión.

La presidenta del Colnud e integrante del Comité Técnico Científico de Fedegán-FNG sostiene que “sólo entendiendo para qué necesitamos las proteínas podremos dimensionar que en realidad son completamente imprescindibles en nuestra dieta diaria. La carne de res no es la única alternativa, qué duda cabe, pero sí la que tiene un mayor porcentaje de proteína en su composición”.

“Consumiéndola, estaremos seguros de dar a nuestros niños, a nuestros mayores y a nosotros mismos, la proteína (y con ello los aminoácidos) que nuestro cuerpo realmente necesita en todas y cada una de las etapas de nuestra vida”, concluyó.

Comparte esta entrada:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore
Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore