Desde la Casa Blanca establecieron un arancel inicial del 25 % a todas las exportaciones colombianas, suspendieron hasta nueva orden los servicios en la sede de la Cancillería en Bogotá y amenazaron con suspender el visado del cuerpo diplomático en pleno.
Barranquilla, 27 de enero de 2024.- Las relaciones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos empiezan a tensionarse a menos de una semana de la posesión del nuevo presidente, Donald Trump.
Este primer conato es un indicio de lo que puede pasar en lo sucesivo, estando Laura Sarabia al frente del Ministerio de Relaciones Internacionales.
Trump, quien retornó a la presidencia de los Estados Unidos prometiendo una dura política migratoria, había causado revuelo cuando anunció que pondría en marcha un plan de deportaciones masivas y la reactivación de las obras en el muro que divide la frontera entre ese país y México.
La mañana de este domingo, ambos mandatarios chocaron duramente por la negativa del líder de Colombia Humana de permitir el ingreso al país de dos aviones que transportaban migrantes ilegales.
«Los EE. UU. no pueden tratar como delincuentes a los migrantes colombianos. Desautorizo la entrada de aviones norteamericanos con migrantes colombianos a nuestro territorio. EE. UU. debe establecer un protocolo de tratamiento digno a los migrantes antes que los recibamos nosotros», escribió Petro en su cuenta en la red social X.
Dura reacción de Trump
Tras enterarse de la noticia, su homólogo estadounidense no dudó en reaccionar, haciendo referencia a la orientación política de Petro como motivo de tal decisión y le enrostró las bajas estadísticas de aprobación de su gestión.
«Me acaban de informar que, a dos vuelos de repatriación de los Estados Unidos, con un gran número de delincuentes ilegales, no se les permitió aterrizar en Colombia. Esta orden fue dada por el presidente socialista de Colombia, Gustavo Petro, quien ya es muy impopular entre su pueblo», posteó Trump en su cuenta de Truth.
Donald Trump también indicó que establecerá un arancel inicial del 25 % a todas las exportaciones y amenazó con cancelar la visa del cuerpo diplomático colombiano, actualmente en ese país.
Como si eso fuera poco, un funcionario de la Cancillería de Estados Unidos confirmó que las oficinas dejarán de atender al público.
“En respuesta a la negativa del presidente Petro de aceptar dos vuelos con deportados colombianos, que anteriormente había autorizado y que habían sido aprobados por los más altos niveles del gobierno, la Embajada de Estados Unidos en Colombia cerrará mañana (este 27 de enero) la sección de visas”, reveló la fuente al diario El Tiempo.
“Petro está violando sus derechos fundamentales”
La decisión de Gustavo Petro ha sido cuestionada desde distintos sectores de la opinión y la cosa pública, porque pone en jaque las relaciones con uno de los socios comerciales y, ‘benefactores’ más importantes para la ejecución de programas a gran escala como la erradicación de cultivos ilícitos y la superación de la pobreza.
Una de las primeras en reaccionar al conato de crisis diplomática, fue la líder de la oposición y precandidata presidencial, María Fernanda Cabal, quien criticó la posición de vulnerabilidad en la que Petro ha dejado a los colombianos cobijados por la política migratoria de Trump.
“Gustavo Petro cada día más Maduro: hace lo mismo que Nicolás Maduro que prohíbe que aterricen los vuelos con las personas deportadas, que tienen derecho a su repatriación porque son nacionales, la decisión de Petro está violando sus derechos fundamentales”, dijo la precandidata presidencial.
Finalmente, la líder de la oposición dejó ver que, dada la gravedad del incidente, desde Estados Unidos podrían tomar medidas más contundentes y que podrían afectar la dinámica en muchos planes, programas y proyectos que financia ese gobierno.
“Razón tiene el presidente Trump, ya que se están infringiendo principios del derecho internacional como la soberanía, la autodeterminación y la impenetrabilidad del territorio. O sea, que él cree que todos los países se tienen que someter a migrantes ilegales, sea cual sea su condición o su argumento, ¡no! Las reglas funcionan en el derecho internacional, no en la cabeza anarquista progre Gustavo Petro”, concluyó María Fernanda Cabal.