Cabal desenmascara el informe de la CDIH que pretende intervenir en asuntos del Estado y no toma en cuenta las violaciones a civiles y uniformados de la Fuerza Pública
Valledupar, 9 de julio de 2021.- La senadora y aspirante presidencial, María Fernanda Cabal Molina afirmó que el informe de la CDIH entregado a Colombia, carece de equilibrio, debido a que no tiene en cuenta el asesinato de los bebés, a los que no dejaron movilizar las ambulancias medicalizadas en que se transportaban en estado delicado, de allí la emergencia, sin embargo los dos bebés no alcanzaron a recibir la atención requerida, porque los mismos brazos políticos del terrorismo urbano inventaron y corrieron el rumor que las ambulancias estaban cargadas de explosivos supuestamente. Uno de estos casos fue una mujer que embarazada con parto prematuro, en el que la criatura perdió la vida, relató Cabal. Las ambulancias además fueron atacadas por los violentos manifestantes, los mismos violentos por los que la CDIH pretende imponer en Colombia con su informe.
Tampoco dejaron pasar medicamento esenciales como lo es el oxígeno que necesitaban los pacientes hospitalizados con Co0vid-19.
Igualmente tampoco tomaron en cuenta las más de 150 noticias Fake News que fueron presentadas en los Estados Unidos, y que evidencian la forma como han alterado la realidad de lo que realmente está ocurriendo en Colombia, con el único propósito de generar más violencia, pero para la CDIH, es perfilamiento. Según la CDIH o pueden ser perseguidos judicialmente, denunció María Fernanda Cabal.
Otras de las denuncia de la aspirante presidencial es la forma subrepticia como CDIH, igualmente abusa pretendiendo ordenar el léxico de los colombianos prohibiendo prácticamente el uso de las palabras con las que deben ser denominados los hechos que ocurren y sus autores. Según este ente del globalismo mundial, aunque se trata de grupos terroristas urbanos, bandas criminales y vandalismo, a pesar de ello y las evidencias del financiamiento de las protestas por parte de grupos terroristas y bandas criminales, según la CDIH han sido infiltraciones, a pesar de las pruebas.
Rechazó además la senador que la CDIH no tuviera en cuenta las denuncias de los atentados y ataques contra la fuerza pública, entre estos los asesinatos, y torturas contra uniformados de la Policía, y el abuso sexual contra una patrullera de la Policía, ni siquiera fue tomado en cuenta, lo que hizo fue dudar, y referirse a esto como “presuntas violaciones a los derechos humanos”. Tampoco le da el valor correspondiente al asesinato de policías con tiro de fusil, y mucho menos reconoce el secuestro, tortura y asesinato contra el patrullero Carlos Andrés Rincón, denunció Cabal Molina.
Al igual que tampoco importa mucho para la CDIH los ataques contra civiles, y a pesar de las evidencias y las destrucciones contra sus negocios y locales comerciales, al igual que contra la, infraestructura del país y todo el daño perpetrado.
Y encima de esto habla de no restringir las protestas pacíficas cuando en Colombia tienen más de dos meses perturbando el orden público, y dañando la tranquilidad y la economía del país destruyendo y sembrando el terrorismo. Pero en cambio pretenden que la Policía salga del Min Defensa y dependa del Ministerio del Interior, una policía Política, es lo que “recomiendan”, propuesta que está al gusto y medida de la ultraizquierda internacional y de los socialistas internos, interviniendo en asuntos que le corresponden al estado colombiano.
Finalmente dijo la senadora y candidata presidencial, que la presencia de estos delegados de la Comisión Interamericana en Colombia, ocurrió igual que cuando venían al país Altos Comisionados de las Naciones Unidas, mientras terroristas tenían en su poder miles de secuestrados, nunca sirvió de nada su visita a Colombia, guardaban silencio, pero nunca hubo solución para los secuestrados estos continuaban en poder de los terroristas.
Para concluir dijo la aspirante presidencial María Fernanda Cabal, que “al fin y al cabo es una agenda global y los que estamos en riesgos somos los colombianos que queremos vivir en libertad y no aceptamos una narrativa distinta a la que estamos palpando”, dijo textualmente.