

El primer viaje al extranjero del máximo diplomático estadounidense refleja el deseo de contrarrestar la influencia china en América Latina. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, inició su viaje a América Latina reuniéndose con líderes panameños y presionándolos para que aborden urgentemente la influencia del régimen chino en la región.
Barranquilla, 2 de febrero de 2025.- El Secretario de Estado de los USA, Marco Rubio, máximo diplomático estadounidense compartió sus preocupaciones de seguridad nacional con el presidente panameño, José Raúl Mulino, y el ministro de Relaciones Exteriores, Javier Martínez-Acha, en una reunión en la Ciudad de Panamá este domingo 2 de febrero.
Este es el primer viaje de Rubio al extranjero desde que asumió el cargo hace menos de dos semanas. El viaje, que incluye escalas en El Salvador, Costa Rica, Guatemala y la República Dominicana, también marca la primera vez en un siglo que un secretario de Estado de Estados Unidos hace de América Latina su primer destino oficial, lo que refleja el deseo de Estados Unidos de contrarrestar el aumento Intrusión diplomática china en la región.
Recordemos las palabras de la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce luego de la visita, quien señaló que “la actual posición de influencia y control del Partido Comunista Chino sobre el área del Canal de Panamá es una amenaza para el canal”.
Por su parte el Secretario de Estado entregó el contundente mensaje del presidente Donald Trump quien advirtió que Estados Unidos “tomará las medidas necesarias” a menos que haya “cambios inmediatos”.
Es así como Rubio calificó el statu quo sobre el Canal de “inaceptable”
Estados Unidos que pasó una década construyendo el Canal de Panamá, que conecta el Océano Atlántico con el Océano Pacífico, no va a regalarle su esfuerzo a los chinos. El caso es que en 1999, en virtud de un tratado de 1977, Panamá tomó el control de la vía fluvial de 51 millas de largo. El acuerdo otorga a Estados Unidos el derecho de defender el canal utilizando la fuerza militar para garantizar la neutralidad del canal y garantiza el uso perpetuo del canal por parte de Estados Unidos.
Sin embargo en la actualidad, una filial de Hutchison Ports, con sede en Hong Kong, opera dos puertos en las entradas del Atlántico y el Pacífico del canal. La compañía ha renovado un contrato de 25 años con Panamá que le permitiría operar estos puertos hasta 2046. Sin embargo el presidente panameño, José Raúl Mulino, luego de las conversaciones con RUBIO y las previas advertencias del presidente Donald Trump, afirmó que ese contrato con Hutchison Ports, se desiste!
Rubio, un halcón respecto de China desde hace tiempo, ha advertido que Beijing, que mantiene un estricto control de las empresas con sede en Hong Kong, podría aprovechar el control de los puertos para cerrar el canal en tiempos de conflicto con Washington. Les dijo a los funcionarios panameños que esa influencia china viola el tratado de neutralidad.
Mulino, quien en enero. 30 descartó negociaciones sobre la propiedad del canal, dijo a los periodistas después de la reunión que las conversaciones fueron muy respetuosas y cordiales y que los funcionarios habían hablado extensamente para “aclarar dudas” de Estados Unidos. La presencia china en el canal fue uno de los temas más importantes en sus discusiones, dijo. Reconoció las preocupaciones de Washington y señaló que las autoridades panameñas están auditando al operador portuario de Hong Kong y que actuarán en consecuencia con base en sus hallazgos. “Esos puertos sí generan dudas pero, como dije, hasta el momento no tengo elementos de juicio para opinar nada más”, dijo, afirmando además que “la soberanía de Panamá no está en duda”.
Panamá rompió sus vínculos con Taiwán en 2017 y meses después firmó la Iniciativa de la Franja y la Ruta, el proyecto de infraestructura global del régimen comunista chino que, según los críticos, atrapa a los países pobres con deudas. Mulino dijo que Panamá no renovará el memorando de entendimiento de 2017 sobre la iniciativa una vez que expire. El presidente panameño también sugirió una posible ampliación de un acuerdo existente de julio pasado para ayudar los esfuerzos de deportación de Estados Unidos. El acuerdo ampliado podría allanar el camino para las deportaciones directas de inmigrantes ilegales provenientes de países como Venezuela, Colombia y Ecuador que cruzan la selva del Tapón del Darién a lo largo de la frontera entre Colombia y Panamá, aunque Mulino dijo que Estados Unidos tendría que cubrir el costo.