Valledupar, noviembre 24 de 2016.- Con el objetivo de identificar factores de riesgo que inciden en las intoxicaciones y complicaciones por el uso, manejo y aplicación de agroinsumos, así como la repercusión que puedan tener estos en el medio ambiente, el gobierno de Francisco Ovalle Angarita adelantaacciones para evitar que los envases de plaguicidas se constituyan agentes contaminantes y afecten la salud pública.
Es así como cerca de 2 mil kilos de residuos de plaguicidas fueron recolectados en distintos municipios del Cesar mediante las jornadas que ha emprendido la Secretaría de Salud a través de la Dimensión de Salud Ambiental, en cumplimiento del cronograma de acciones del programa de Vigilancia Epidemiológica de Plaguicidas en el último mes.
Las jornadas iniciaron el pasado mes de octubre con la campaña de recolección de envases en desuso de plaguicidas en los alrededores de las instalaciones del Batallón de Ingenieros No. 10 General Manuel Alberto Murillo, en Valledupar, donde con la colaboración de la Secretaria Local de Salud de Valledupar y del personal de la institución militar se recogieron 250 kilos de recipientes en desuso, los cuales fueron almacenados en un centro de acopio en las instalaciones del batallón, donde la corporación Campo Limpio comenzó esta semana el proceso para su disposición final según lo establecido en la normatividad sanitaria.
Las campañas se extendieron a los municipios de Río de Oro, San Alberto, Curumaní, y San Alberto, donde se recogieron 560 kilos de residuos; y hasta González, donde se recolectaron un total de mil kilos, siendo este municipio en el que se encontró la mayor cantidad.
La líder de la dimensión de Salud Ambiental, Melba Cadavid Arango, anunció que se tiene prevista la construcción de centros de acopio regionales para almacenar estos residuos mientras se hace el proceso de disposición final y señaló que gracias al trabajo que realiza el equipo de Salud Ambiental y los técnicos ambientales en todo el departamento, sensibilizando a las comunidades, se han logrado disminuir los casos de intoxicación por uso de agroquímicos. “Las cifras indican que en municipios como González, donde se contaban 35 casos de intoxicación al año por riesgo laboral, en el 2015 solo se registraron cuatro”.
Cadavid Arango indicó que los envases vacíos de plaguicidas, por contener restos de estos productos, son una fuente potencial de contaminación y el agricultor, especialmente de las zonas rurales, no toma conciencia del manejo que se le debe dar a estos envases que constituyen un creciente problema para el ambiente y su salud.
Aunque el Cesar no figura en los departamentos con mayores índices de intoxicación por plaguicidas y sustancias químicas, según el reporte del sistema de vigilancia epidemiológica, el año anterior se registraron 152 casos.