Colombia hace parte de la Convención Americana sobre Derechos Humanos CADH, la cual creó la Corte Interamericana de Derechos Humanos CIDH. Según se lee en su página web, “La CIDH es un órgano principal y autónomo de la OEA encargado de la promoción y protección de los derechos humanos en el continente americano”… Personalmente me llama la atención que esa defensa es férrea y exigente si a quien denuncian es de derecha; paquidérmica o inexistente si el violador de DDHH es de izquierda (Chávez, Maduro, Ortega son algunos ejemplos de ello).
A Nuestro país le ha ido muy mal en la CIDH, ha sido condenado en decenas de oportunidades a pagar cuantiosas sumas por violaciones a los Derechos Humanos. Como he mencionado en escritos anteriores uno de los casos más emblemáticos de esas condenas injustas lo constituye la masacre de Mapiripán, pero no el único. Demandar al Estado es un gran negocio, en eso la izquierda y sus aliados ( colectivos de abogados, ONG´s, mal llamados defensores de DH, etc. ) son expertos y la CDIH una gran caja de resonancia a sus intereses ( pueden leer https://t.co/wVWJrej8MI ).
Los militantes de la izquierda saben perfectamente que tienen en la CIDH un aliado estratégico que los secunda en todo, el caso de Gustavo Petro es uno de los más elocuentes: Fue destituido por la Procuraduría en un acto ajustado al marco legal del país (por hechos violatorios al sistema de contratación del estado y por un detrimento patrimonial con el tema de las basuras que fue perfectamente evidenciado). Pese a ello Petro se hizo la víctima, recurrió a la CIDH y en una decisión extrañamente rápida (pocas horas) obtuvo medidas cautelares que impidieron que fuera destituido; terminó su periodo con las consecuencias que los bogotanos, especialmente, conocen.
Ahora el turno de usar a su favor a la CIDH corresponde a alias Santrich (preso por su participación en negocio de más de 10 toneladas de coca) y alias Iván Márquez (desaparecido, ni la JEP ha podido contactarlo. Recordemos que huyó luego que su sobrino Marlon Marín iniciara sus testimonios en USA sobre actividades ilícitas de jefes de las FARC después de la firma del acuerdo) quienes anuncian que recurrirán a dicha corte para solicitar medidas cautelares “Por incumplirles el Acuerdo de Paz”. Con los antecedentes conocidos es muy posible que la CIDH otorgue dichas medidas a este par de sujetos no obstante la cantidad de líos judiciales que tienen sobre sus hombros después de la firma. Como he dicho en ocasiones anteriores siempre les saldremos a deber, incluso debo reconocer que Roy Barreras tiene razón cuando afirma que jefes FARC, con distintos líos penales, no están violando el acuerdo; en ese documento no hay nada que los obligue, no se comprometieron realmente a algo concreto, solo hay concesiones del Estado; pero como tanta gente apoyó eso sin leerlos ahora se rasgan las vestiduras y / o se hacen los ofendidos por el cinismo de los jefes FARC.
Así como Estados Unidos se retiró del Consejo Derechos Humanos de la ONU por su inoperancia e incluso protección de abusadores de D H, considero que es tiempo de analizar la conveniencia para Colombia de mantenerse en la CADH y en la CIDH. Está probado que sólo ha servido para condenar al Estado colombiano; para que con su beneplácito y complicidad (por el sesgo político que manejan) los de izquierda y sus aliados puedan eludir la justicia y la ley colombiana, posen como víctimas y reciban privilegios y cuantiosos recursos del erario vía condenas de la CIDH. “DEBE COLOMBIA ESTAR EN LA CADH Y EN LA CIDH?”.
EL COLMO 1: Siguen apareciendo bienes no declarados ni entregados, al igual que armas no reportadas por las Farc. Tampoco la JEP sabe algo de varios jefes Farc (Romaña, El Paisa, Iván Márquez). Estos temas no tienen ninguna implicación, ni sanción para ellos; en el acuerdo Santos Farc (que el Pueblo Soberano VOTO NO) no quedó explicito nada frente a incumplimientos de su parte. NO HAY DERECHO.
EL COLMO 2: Dice el ELN que el Presidente Iván Duque está haciendo trizas la paz, todo porque ha sido reiterativo de no negociar mientras no liberen a todos los secuestrados y cesen actividades criminales. Creen que pueden seguir como durante el gobierno de Santos, cometiendo crímenes atroces mientras dialogan. NO HAY DERECHO.