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Barranquilla, 27 de junio de 2020.- La alcaldía de Santa Marta informó por medio de un comunicado que se encuentra trabajando para el mejoramiento y modernización de los centros hospitalarios que se están disponibles para la atención de pacientes como medida importante para enfrentar la crisis sanitaria por cuenta del Covid-19.

Señala textualmente el comunicado de la Alcaldía que “la ciudad de Santa Marta cuenta actualmente con una moderna infraestructura física y arquitectónica en la red pública hospitalaria, reflejada en los Centros de Salud de Bastidas, La Paz, Taganga y el IPC La Candelaria, construida y entregada a los samarios en las anteriores administraciones.

Explica que este vierne realizaron visitas de inspección a las instalaciones físicas de los Centros de Salud de Bastidas, la Paz, Taganga y el IPC La Candelaria, y encontraron las instalaciones físicas en óptimas condiciones; sin embargo, afirman que la administración de la ESE Alejandro Prospero Reverend no ha sido eficiente en la prestación del servicio de salud.

Recuerda que estos modernos centros asistenciales fueron construidos con los estándares de normatividad exigidos por el Ministerio de Salud y Protección Social y puestos en funcionamiento con nueva dotación de equipos médicos; por lo que señala que se trata de una gran inversión que debería ir de la mano con la óptima prestación de estos servicios.

Señala además que la alcaldesa Virna Johnson, en labores de inspección y control exige constantemente que los servicios ofrecidos en estos centros de salud, administrados por la ESE Alejandro Prospero Reverend, sean los adecuados para los samarios, especialmente durante la pandemia por Covid-19.

Cabe precisar que la Secretaría de Salud del Distrito radicó ante la Procuraduría General de la Nación, una denuncia en la que expone hallazgos en materia de administración en los centros y puestos de salud de la ESE Alejandro Próspero Reverend, en los que, no obstante contar con una óptima infraestructura física, se presentan falencias en el cumplimiento de los protocolos para contrarrestar el Covid-19, las cuales afectarían el bienestar y la salvaguarda de la salud de los pacientes y del personal sanitario que allí labora.