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Barranquilla, 4 de noviembre de 2019.- Álex González Castillo, alcalde de San Juan de Lurigancho, uno de los 43 distritos de la provincia de Lima, ubicada en el departamento homónimo, en el Perú, al noreste de la ciudad y con más del millón de habitantes, el distrito más poblado del país, só a 30 venezolanas que se encontraban un lunes a las 10:00 de la mañana consumiendo licor, y al parecer también droga en sitio de lenocinio que fue allanado directamente por el mismo mandatario, quien él mismo pudo observar.

El hecho ocurrió el pasado 21 de octubre en que visiblemente indignado dijo en declaraciones ante medios de comunicación Álex González Castillo, alcalde de ese Distrito que en San Juan de Lurigancho la gran mayoría de venezolanos que migró a Perú por la crisis que atraviesa Venezuela, se dedica únicamente a cometer delitos, porque “los refugiados que han llegado a Perú huyendo de la dictadura de Maduro, es lumpen, gente que consume droga, bebe y se intoxica y sale a asaltar”. 

Señaló que en su Distrito no hay lugar para estos hechos. Añadió que 2 millones y medio de jóvenes de su país están sin trabajo, y se les da una oportunidad a estos venezolanos y la desperdician. Además de reclamar el daño que le hacen a su población, con el mal ejemplo que especialmente están dando a los jóvenes de su Distrito.

Expresó que los recursos que gasta la Policía del Perú, y los esfuerzos haciendo rondas de madrugada, son muchos: “Nuestra Policía y Municipio gastan mucho dinero en controlar la delincuencia y los excesos de extranjeros como ustedes. Aquí en San Juan de Lurigancho no hay lugar para delincuentes. No los quiero ver más por acá”, por lo que advirtió que no le van a ceder un milímetro.

Sentenció además que ellos podrán faltar el respeto en su país pero al Perú les advirtió que lo tienen que respetar, además de reiterarles que no quería verlos más por allá.

Una vez terminó su advertencia, 30 mujeres jóvenes fueron sacadas del lugar y subidas a un camión de la Policía y el lugar fue sellado. Y solicitó al comandante aplicar la ley y expulsarlos.