Desde siempre el negocio de la Ganadería se ha dividido en dos grandes vertientes, Leche, por lo general gran generador de ingresos para el sostén de la empresa y, Carne, efecto básicamente del negocio lechero no especializado con nacimientos de terneros, machos por lo general, que se llevan hasta edades de destetes, luego se comercialicen entre aquellos que teniendo pastos y tierras suficientes se dedican a la Ceba, o quienes encuentran acá un excelente y seguro negocio con rentabilidades efectivas más allá de las ofrecidas por el sistema financiero, igualmente hay muchos ganaderos que hacen el ciclo completo, leche, cría, levante y ceba hasta llegar al beneficiadero.
En los últimos años la ganadería ha venido encontrando un nuevo nicho de mercado, Exportación en Pie, se trata de un negocio floreciente en constante crecimiento que viene presionando al mercado nacional dada su alta demanda mercado Global (264.000, 2020). Con la aparición de este eslabón de la producción bovina se hace necesario especializar territorial y genéticamente las regiones acompañado con un programa fuerte y dinámico programa de trazabilidad, para cumplir con la alta demanda y fortalecer la ganadería nacional haciéndola cada día rentable y atractiva, así dejar los tiempos de afugias socioeconomicas.
La ganadería ha tenido que enfrentar el estigma del terrorismo, abigeato que azota de manera inmisericorde al Empresario del Campo, junto al Sacrificio ilegal (“Frigopotrero”, así le llaman los Frigoríficos), junto a la caída de los ingresos de la Pandemia ha llevado en algunas regiones disminución en el volumen del sacrificio hasta el 40% con relación al año anterior; nada tiene que ver la caída del consumo con la falta de suministro de metería prima a los frigoríficos por causa de las exportaciones en pie; la caída de la oferta y alza promedio de los precios del ganado en esta época del año son una constante cíclica de la mano con las estaciones de invierno y verano del trópico en Colombia.
Ahora bien, es absolutamente claro que la entrada de un nuevo jugador en el negocio ha generado mejoras en el precio de los ganados machos en particular y hembras por simple reflejo, a precios que jamás sospecharon los frigoríficos tendrían que pagar en el mercado libre con esta nueva competencia.
El censo ganadero en Colombia es de 28.245.262 bovinos, de ellos históricamente aproximadamente el 63.4% son hembras (17.907.496 Cabezas), 36.6% machos (10.337.766), del total del hato los terneros nacidos vivos son el 17.69% (4.996.587), con una tasa de extracción que ha venido en franco descenso del 20%, en 2015 al 14.4%, en 2020, quiebran cualquier tipo de argumentación por desabastecimiento debido a la salida de ganado en pie, lo cuales llegaron a la ínfima suma de 264.000. Al cierre del año anterior, sería un craso error coartar de alguna manera las exportaciones en pie con base en la argumentación sostenida por los Frigoríficos. Acompaño al dr. Jose Gamarra al exigir mayor efectividad en el negocio de los frigoríficos para optimizar sus utilidades y no presionar a través de la comunidad al Gobierno con argumentos sin soportes fácticos y contables de la disminución de sus utilidades sacrificando al ganadero que es quien produce la materia prima para su negocio; las razones de la disminución del consumo interno no están únicamente en la caída del consumo interno, 18.2 K percapita (Fedegan), 10.7 K (OCDEA); la ingesta de carnes de Pollo y Cerdo aumentaron en 10 y 4 kilos respectivamente soportados en campañas publicitarias permanentes que han recortado el consumo de proteína bovina, amén de mayores costos de esta, jamás han ido atados los precios al consumidor a las pronunciadas bajas que por largos periodos han pagado por el ganado en pie al productor.
Al Final cada quien busca el bienestar de su empresa, lo que no puede ser posible es que entre nosotros, pretendamos maximizar utilidades a costas del permanente sacrificio del otro, basta, hay un nuevo jugador en el mercado trayendo bienestar económico al negocio ganadero.
Señores, el futuro es promisorio para la ganadería, sin dudarlo podemos decir que Colombia por su posición terráquea está llamada ser una potencia ganadera en la medida que se especialice la Genética de Leche, Cría y Ceba; Regionalice y se implante definitivamente la Trazabilidad; junto al Sello País de Ganadería Sustentable debidamente certificado, esta es la oportunidad de salir adelante, no la desaprovechemos, hay que aumentar las exportaciones en cortes congelados, pie en incentivar el consumo interno, así todos ganamos.