Barranquilla, mayo 16 de 2017.- En el departamento de Sucre, crece el nerviosismo y la desesperación de la comunidad debido a los fuertes aguaceros que hoy anegan a La Mojana sucreña, donde cerca de nueve municipios han declarado la calamidad pública por la arremetida del invierno que se registra, y para la que no estaban preparados, por lo que hay gran preocupación también para el Gobierno departamental, quienes, según ellos, “a pesar de trabajos de mitigación que se venían realizando desde el pasado mes de diciembre”, pero todo indica que ha sido a distiempo e ineficiente.
Este lunes, José Nicolás Vega Lastre, coordinador de Gestión del Riesgo de Desastres del departamento, manifestó a medios de comunicación la preocupante la emergencia, por la que municipios como Guaranda, San Marcos, Majagual, Sucre, Ovejas, San Onofre, Coveñas, Corozal y Sincelejo han declarado la calamidad pública por las intensas lluvias registradas en las últimas semanas, pero que, sin embargo, la Gobernación de Sucre realiza constantes monitoreos a los niveles de los ríos, arroyos y quebradas para estar alertas a cualquier situación que se llegara a presentar.
“El aumento en los niveles de los ríos Cauca y San Jorge ha ocasionado el colapso de puntos críticos en la región de La Mojana sucreña, por cuanto aún continúa lloviendo. Además, se han alcanzado los picos más altos de las precipitaciones que provocaron dos partiduras en Boca de los Moncholos, jurisdicción de Bolívar, y en la cabecera municipal de Guaranda”, expresó el funcionario.
Así mismo, Vega Lastre explicó que la administración de Édgar Martínez Romero, desde la temporada de sequía, viene ejecutando trabajos preventivos de mitigación con 11 maquinarias de la Gobernación de Sucre, y que se han activado los Consejos municipales de Gestión del Riesgo, además de los constantes monitoreos que según ellos vienen haciendo, para estar preparados ante una emergencia que al parecer, aún no han visto.
El jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres de Sucre resaltó que el Gobierno departamental ha estado de frente a esta situación, y que por ello se ha trabajado en el plan de contingencia y en algunas soluciones artesanales con costales y estacado, lo que logró controlar las filtraciones el pasado domingo, pero que, sin embargo, el panorama es preocupante por el acelerado aumento en los niveles de los ríos Cauca y San Jorge