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Barranquilla, 16 de noviembre de 2020.- Luego de una solicitud por parte del funcionario de mayor rango del Subcomité de Operaciones Gubernamentales Jody Hice, Republicano en representación de Georgia que envió este 13 de noviembre a través de un documento escrito a Emily Murphy, Administradora de la Administración de Servicios Generales GSA, en la que le ordena corrigir la tergiversación de los Demócratas de la Ley de Transición Presidencial de 1963 y pidiendo a GSA que se adhiera a la Constitución al determinar un Presidente electo.

Esta mujer Emily Murphy, es la encargada de reconocer al Presidente y posible transferencia de mandato para comenzar el proceso, le tocó decirle en razón de la solicitud del Republicano Jody Hice, que tenía que informarle al equipo de Joe Biden, “usted no es presidente electo”. “Porque en estos momentos hay muchas denuncias y reclamaciones sin solucionar, por lo que hasta el momento no hay ni Presidente ni Vicepresidente electo”.

La carta de Jody Hice, el representante Republicano decía textualmente “Al contrario de las quejas emitidas por los demócratas de supervisión de la Cámara, la Administración de Servicios Generales ha seguido la letra de la ley. Los gobiernos estatales certifican los resultados de las elecciones; ni los medios de comunicación, ni los partidos políticos. Cuando se certifica la elección, anticipamos que la GSA tomará las medidas adecuadas según sea necesario. Hasta entonces, nuestra prioridad debe ser garantizar que esta carrera sea una elección justa y libre con un recuento honesto”, a lo que la funcionaria se acogió obligatoriamente luego de que los democrátas el 9 de noviembre le habían enviado una carta tergiversando la condición de Biden, por lo que a la mujer le tocó corregir.

En la carta, el republicano Hice describe las tres situaciones en las que no hay un presidente electo aparente. Las tres situaciones se aplican a las elecciones de 2020. El administrador de la GSA debe determinar el presidente electo con base en la Constitución y el precedente pasado, los cuales indican que no hay un presidente electo aparente. La asistencia de transición financiada por el gobierno solo se puede proporcionar después de que GSA haya tomado una determinación.

Le afirma el Republicano a la administradora Murphy, sobre la carta enviada por los miembros de la Cámara Demócrata que han tergiversado los hechos relacionados con sus responsabilidades en virtud de la Ley de Transición Presidencial de 1963 Ley. Y le advierte que le escribe para corregir el registro.

“Según la Ley, usted, como administrador de la Administración de Servicios Generales (GSA), tiene la autoridad para proporcionar asistencia de transición financiada por el gobierno al presidente electo y al vicepresidente electo. Sin embargo, esta asistencia solo puede ocurrir después de que haya “candidatos aparentemente exitosos para el cargo de Presidente y Vicepresidente, respectivamente, según lo determine el Administrador [usted]”.

Y le aclara cuales son los tres casos esenciales en que se puede pronunciar 

1. Los redactores de la ley anticiparon tres situaciones electorales en las que habría un presidente electo no aparente: (1) un empate, (2) un ganador de la pluralidad o (3) la presencia de un extenso fraude o intimidación de votantes. El tercero es aplicable a 2020 desde que la campaña de Trump ha planteado preguntas y presentado desafíos legales en varios estados;
2. Los redactores concluyeron que “si hay alguna duda en la mente del Administrador”, el Administrador no tiene que liberar la asistencia de transición. Dado que los estados aún no han certificado a un ganador electoral y algunos estados todavía están tabulando los votos legales, sigue habiendo dudas sobre el ganador; y
3. El precedente establecido por la Administración Clinton en las controvertidas elecciones de 2000 es que para determinar un aparente presidente electo sería necesario que hubiera una concesión, lo que aún no se ha producido en 2020, o no más impugnaciones legales continuas legítimas, que aún no se han producido en 2020.

Según la intención del Congreso y el precedente pasado establecido por el presidente Clinton, a la fecha, no hay un presidente electo aparente.

Un portavoz de la GSA declaró recientemente que “el administrador de la GSA determina el aparente candidato exitoso una vez que el ganador está claro en base al proceso establecido en la Constitución”. Le agradezco que haga precisamente eso: siga la Constitución y el precedente pasado, no los medios de comunicación, cuando tome su decisión sobre el Presidente electo. Esta democracia se basa en un estado de derecho y se debe respetar la ley.