AGRONOTAS, COLUMNISTAS

La medición del crecimiento económico trimestral muestra el sector agropecuario sólido, aumentando el 1.5% con respecto al mismo periodo 2019; crecimiento ponderado del 2.8% en lo corrido de este 2020; La participación en la ocupación laboral es de 4.032.000., empleos directos de acuerdo al DANE, frente a la reactivación económica vale la pena reflexionar.

El sector ha mantenido la carga laboral a su cuenta desde inicios de pandemia a lo que va de reactivación, con altos y bajos como las estadísticas lo han venido mostrando, ¿Porque no fortalecer lo agropecuario con la creación y puesta en marcha de obras de infraestructura de alto impacto que permitirán tener una mayor participación en los mercados de consumo?

Adolecemos de tres necesidades básicas para emprender el camino del fortalecimiento agropecuario, Infraestructura de Riegos y Drenajes; Vías Secundarias y Terciarias; Acceso al Crédito, rodeado de políticas de seguridad objetiva y jurídica a la población e inversiones para hacerla atractiva y rentable, ejemplos de naciones que han logrado salir adelante ante las adversidades hay muchos, el secreto está en fijar metas y no dispersar esfuerzos.

Frente a la reactivación laboral es claro las ventajas que traería el apoyo decidido al sector agropecuario, seguridad alimentaria, vocación de permanencia, retorno a orígenes.

Seguridad Alimentaria, Colombia hoy tiene en su balanza de importaciones de alimentos, sean materia prima o productos transformados que se podrían producir en nuestras tierras trayendo alta ocupación laboral, Maíz, Soja, Papa, Leche, Aceites de Palma,  por solo mencionar algunos en los cuales se ha demostrado ser competitivos  en igualdad de condiciones con países exportadores que sus gobiernos han hecho de la seguridad alimentaria parte esencial de la seguridad nacional.

La empleabilidad en el sector agrícola en particular, mayor jalonador de ocupación laboral rural, cuya característica básica es la estacionalidad  de mano de obra en los cultivos de ciclo corto,  diferente a transitoriedad  de puestos de trabajo, las sociedades siempre demandarán materias primas para su consumo o transformación, los puestos de trabajo son estacionales con vocación de permanencia en este tipo de cultivos, en los de tardío  rendimiento  como los frutales, Mango, Marañón, Guanábanas , Cítricos, Palma de Aceite,  la estabilidad laboral está garantizada en su mantenimiento, recolección y transformación.

Migración Urbana/Rural, retorno al campo, el efecto más trascendental e importante que traería consigo el apoyo decidido a la producción agropecuaria, será bajar la presión  a ciudades y poblados generadas por los cordones de miseria, impactando temas de necesidades básicas insatisfechas e inseguridad ciudadana, así como servicios públicos; de la mano con ello la implementación de programas de educación con enfoque rural diferencial y vivienda rural, creando una nueva clase socioeconómica con mejores condiciones de vida más allá de la economía de mera subsistencia en la cual ha estado sumida.

Los demás herramientas para el desarrollo agropecuario vienen de la mano a estas medidas básicas que permitan productividad efectiva y ocupación laboral, no pretendamos ser constructores de aviones sin tener  construidas y aseguradas las pistas de aterrizaje y decolaje en las cuales se harán las pruebas, el solo túnel de viento no demuestra la eficacia de las aeronaves. La Pandemia ha demostrado lo importante que es para la nación el sector agropecuario, es el momento de tener muy claro qué es de la esencia para la subsistencia del hombre asegurar su efectividad productiva.

Es momento del sector agropecuario, no dejemos pasarlo, ojala y aun no sea tarde.