La Procuraduría evalúa a la entidad sobre los procesos adoptados frente a presuntos ocupantes de bienes de uso público en Playa Blanca para prevenir daños al ecosistema.
Barranquilla, 6 de marzo de 2025.- Velando por la preservación y el cuidado ambiental de Playa Blanca, en isla Barú, en la Costa Caribe, la Procuraduría llamó la atención a la Corporación Autónoma Regional del Canal del Dique – CARDIQUE- para que informe sobre las acciones que ha tomado para prevenir los daños ambientales en el área.
Aunque se han hecho compromisos y la entidad ha venido imponiendo sanciones a los responsables del daño ambiental, para el Ministerio Público ronda preocupación pues en la zona persisten vertimientos inadecuados de aguas residuales, acumulación de basuras, proliferación de negocios, falta de baños públicos y mal manejo de residuos sólidos provenientes de actividades hoteleras y cabañas turísticas.
La crítica situación de amenaza al medio ambiente en Playa Blanca también se extiende a la ciénaga de Portonaito, en donde el riesgo de contaminación del ecosistema es alto por la llegada constante de embarcaciones con fines turísticos, que están generando la disposición de residuos sólidos ordinarios y peligrosos con el derrame de aceites y combustibles sobre las aguas.
Estos hechos llevaron a la Procuraduría 3 Judicial II para Asuntos Ambientales y Agrarios de Cartagena a exigir explicaciones a CARDIQUE sobre las actuaciones administrativas adelantadas contra 148 predios que realizan actividades en terrenos de uso público en Playa Blanca y cómo avanzan los procesos sancionatorios por incumplimiento de los compromisos pactados en años anteriores.