
Colfecar denuncia falta de presencia estatal en corredores estratégicos y exige acciones inmediatas del Gobierno para frenar la violencia contra el transporte de carga. El gremio advierte que el país está regresando a una logística limitada por el miedo.
Valledupar, 16 de julio de 2025. El Ministerios de Defensa anunció $300 millones de recompensa por información que permita capturar a los criminales que hirieron a un conductor y quemaron seis cabezotes de tractomulas en la vía Cali – Buenaventura, en Valle.
Es asi coml la violencia volvió a golpear al transporte de carga en Colombia. En la madrugada de este miércoles, seis tractomulas fueron incineradas y un conductor resultó herido en un nuevo ataque armado sobre la vía que conecta Cali con Buenaventura, uno de los corredores más estratégicos para el comercio nacional.
Los hechos, que generaron alarma en el gremio y en las autoridades regionales, ocurrieron entre los kilómetros 16 y 25 del tramo vial. Tres vehículos fueron incendiados cerca del kilómetro 16, uno más en el 25, y dos en un parqueadero en el kilómetro 17.
Además, en la zona fue hallada una granada de fabricación artesanal, según confirmó la Policía del Valle. El conductor herido fue atacado con arma de fuego y trasladado a un centro asistencial en Buenaventura, donde recibe atención médica.
La escena se repite casi con el mismo patrón del pasado 4 de julio, cuando otros vehículos fueron blanco de ataques en el mismo corredor, también durante la madrugada. Para los transportadores, se trata de una situación insostenible que desnuda la fragilidad en la seguridad de la ruta y la ausencia de control en zonas críticas durante la noche.
Desde Colfecar, el gremio que representa a los transportadores de carga, se elevó una voz de indignación. La agremiación denunció que estos hechos demuestran la ausencia efectiva del Estado en la vía.
“No puede ser que cada vez que los bandidos quieran, salgan a incinerar vehículos con total impunidad”, señalaron.
En palabras del gremio, el transporte de carga está siendo condenado a operar únicamente de día, como en los peores momentos de la violencia en Colombia, lo que afecta la logística nacional, ralentiza las operaciones y encarece los costos.
Colfecar fue enfático en exigir que la situación no puede seguir siendo objeto de reuniones y estudios.
Reclamó acciones concretas del Ministerio de Defensa y de las autoridades de seguridad para garantizar el libre tránsito y proteger la vida de los conductores, además de salvaguardar la continuidad del servicio público del transporte, pilar de la dinámica económica del país.