JUSTICIA

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Barranquilla, 24 de abril de 2018.- Está lunes Noticias Caracol reveló en primicia apartes de la audiencia llevada a cabo contra la representante y senadora electa Aida Merlano Rebolledo en el caso del proceso del cual le acusa de compra de votos para el día de las elecciones del congreso del 11 de marzo. Apartes en los que se escuchan las acusaciones del testigo que se conoce con el nombre de Francisco Rafael Valencia Borrero, y las declaraciones de la congresista relato de la Sala Penal de la corte de lo que según él dice que le consta.

Afirmó Palencia Borrero que la presunta organización para la compra de los votos eran liderada directamente por la congresista y que la conformaban 2000 personas aproximadamente. Francisco Rafael Valencia también afirmó que no es la primera vez que esto sucede supuestamente ya desde el año 2015 se venía obrando de esta manera en las elecciones locales del 2015, en las que fueron elegidos 

Según Noticias Caracol, con el testimonio de este hombre fue que la Corte Suprema de Justicia le dictó medida de aseguramiento. Según este hombre en la sede de la campaña de ahí ubicada en el barrio el Golf de Barranquilla, él pertenecía al supuesto engranaje donde se llevó a cabo la operación contra el sufragante del cual es acusada.

Afirmó que en el lugar se verificaba los datos de quienes la apoyaría y para eso también habría participado funcionarios de la Registraduría. Textualmente señaló “que para tener la seguridad del lugar de votación del votante, habría participado la Registraduría”, según él, “para controlar las huellas de la información donde sufragaban sitio de inscripción y fotografías con la finalidad de garantizar el voto en la zona respectiva”. El testigo también le dijo a la Corte que se daba la retención de cédulas por parte de los funcionarios de la campaña a los potenciales sufragantes cuando no eran confiables para la organización”. Y según él “les quitaban las células dos semanas o un mes, luego de que ya se hubieran verificado se les obligaba a zonificarse en determinado sitio y se le regresaba el documento de identificación pero antes se le tomaban fotocopias y tras la zonificación, volvía el comando posteriormente el día de las elecciones, luego de entregado el certificado electoral recibía el dinero. Y según señaló el testigo no hay que enfocarse solamente en el dinero que se da por la compra del voto en sí, porque cada voto se pagaba por la suma de 50.000 pesos, del que primero se le hacía un avance de 15.000 pesos para comprometer al votante. No obstante según las declaraciones del testigo el voto salía en 70,000 pesos”, dijo Francisco Rafael Valencia Borrero, quien según él, era líder directo de Aida Merlano carnetizado porque según él a ese comando no podía entrar nadie que no estuviera carnetizado.

Así mismo el testigo dijo Francisco Rafael Palencia, quien supuestamente tiene la clave con la que se habría organizado todo el operativo para la compra de votos en el comando de la entonces candidata en la ciudad de Barranquilla.

Este hombre Palencia quien durante su declaración de dos horas y media dónde explicó cómo habría operado la organización en la denominada Casa Blanca, añadió que en todos esos municipios donde hay líderes que colocan 1000 votos en adelante con lo que se puede deducir que la compra de votos estuvo por encima de los 7000 millones de pesos, según él

Según el testigo de la Fiscalía Aída Merlano tenía un grupo de dirigentes políticos a su servicio, involucrando con ello a concejales y diputados del gerleinismo. Según dijo, en el 2015 ellos mismos habrían sido beneficiario de la misma estrategia, la diputada Margarita Balen, el concejal Aissar Castro y a otros dos dirigentes Vicente Támara y el concejal Zamora a quienes la Fiscalía estaría rastreando sus pasos según dijo Noticias Caracol.

Textualmente el testigo afirmó que alcanzó a ver dentro del comando a quienes estarían organizados por días, porque no todos podían ir el mismo día, por lo que un día se organizaba la gente de Aissar Castro, el otro día se organizaba la gente de Zamora el otro día la gente de Margarita Balén, y otro día la gente de Vicente Támara. Según dijo el testigo todo se movía en una alianza de favores. Y cuando vienen las elecciones se tiene que devolver el favor, “es decir los que ya se eligieron con el dinero de ella, les tocaba aportar tanto en recursos como en personal y votos, es un tú me das, yo te ayudo, tú me apoyas yo te apoyo”, indicó Palencia.

Según él dijo se paga una mensualidad sostenimiento para que esos líderes que asistieran a las reuniones y permanecieran en los barrios pendiente de sus de los electores recopilados de que no se perdiera un solo voto, de que otro político no le vaya quitar los votos manteniendo una votación. Añadió que en la Casa Blanca había dos salones utilizados para las reuniones donde según el enseñaban cómo se iba estructurar el manejo de los votos, y para pagar a los líderes.

Por su parte Aída Merlano sostiene que es inocente y “se declaró víctima de un montaje que aunque Colombia entera la señale de cosas diferentes a lo que es su realidad, ella es inocente”. Al igual que el abogado quien durante la audiencia pidió suspenderla por el estado anímico de la congresista, presentó certificaciones de psiquiatras que señalan a Aída Merlano con trastorno bipolar y episodios compulsivos. Por lo que ella misma le solicitó al juez que considerara muy bien al tomar su decisión, su condición de mujer cabeza de familia, y la salud de su hijo de 14 años con el que ha tenido muchas dificultades a lo largo de los años. El magistrado no tuvo en cuenta su estado de salud y su condición de madre cabeza de familia.