Corría el año 1993, el departamento del Cesar era un polvorín por cuenta de la aparición en el escenario del Narcoterrista Simón Trinidad, lo conocí como amigo de mi casa, probo, gerente de banco, en mis recuerdo de niñez lo guardo como quien alquilaba películas de Betamax, fue su fachada, por razones que sociológicamente no alcanzo a entender engendro un profundo odio visceral con sus coterráneos, con él llegaron muchos de los que hoy posan como adalides de la moral pública, desatando la peor persecución, secuestros, desplazamientos forzados, desapariciones, hurtos continuados, ocupaciones ilegales de la propiedad privada rural, todo tipo de conductas delincuenciales; diezmaron la capacidad productiva de aquella prospera región del centro del Cesar en cercanía a la Serranía del Perijá.
Al finalizar el siglo anterior con una economía destruida, la región totalmente fuera de control político y territorial, convertida Colombia en país inviable, repudiado y rechazado en el ámbito internacional, sin oportunidades para el Sector Rural, con la Majestad del Estado de Derecho desplazada por el Narcoterrorismo de las Farc-Ep y otros grupos de antisociales que dominaron gran parte del territorio nacional, las ramas del poder público con pérdida de autonomía e independencia, irrumpe en esta tempestad sociopolítica Álvaro Uribe Vélez trayendo un halo de esperanza a quienes hemos creído que el presente y futuro de la patria pasa necesariamente por el Desarrollo Rural y Agropecuario, dada la vocación agropecuario que tiene su Territorio y Nación, su planteamiento sencillo y practico, retoma de la Majestad del Estado de Derecho pérdida, a través de los principios de la Seguridad Democrática, regreso de la esperanza a la Nación con el ejercicio de la autoridad en todo el territorio, en particular en la ruralidad.
Algunos de los resultados logrados en su mandato.
Sector Rural y Agropecuario sus logros fueron entre otros
Lastimosamente creímos en la oportunidad de continuar el legado de su política en manos de Juan Manuel Santos, quien al día siguiente de su posesión sin reato alguno mostró a lo que venía, acabar con lo logrado por su antecesor, Santos cerro sus mandatos dando apariencia, disfrazando de legalidad a unos acuerdos con quienes habían llenado de sangre, desgracia y desasosiego a la nación a pesar de haber sido negados por el Constituyente Primario lo que le hacen abiertamente Ilegítimos respaldados por un congreso doblegado por intereses económicos individuales sin atender los designios del Constituyente Primario, entregándoles a título de mera gratuidad diez curules en el congreso sin haber cumplido ninguno de los presupuestos ofrecidos de Verdad, Justicia, Reparación y Garantía de No Repetición, por el contrario permitiendo la coptación de las ramas del poder público y órganos de control por la oposición en todo el andamiaje del Estado hasta llegar a hoy donde tenemos por primera vez y ojala última, a quienes causaron los peores desastres socioeconómicos en la patria legislando a su favor, y en detención domiciliaria a aquel que les arrebató el Estado de Derecho, recuperándolo de las garras del Narcoterrorismo.