*Exfiscal, exmagistrada, exprocuradora Delegada ante el Consejo de Estado. Decana Facultad de Derecho
En estos tiempos se vislumbra la falsa sabiduría, que otorga una parte del conocimiento, adquirido en las escuelas y universidades, transmitido por profesores ignorantes mas no analfabetas, quienes no pueden autotitularse maestros, porque esa dignidad la perdieron hace décadas, al dejar de seguir los postulados de Maestro de maestros y son seguidores confesos de Petro y en el escenario menos vergonzoso de Fajardo, quien al menos con un poco de dignidad no le apuesta al antes mencionado, siendo coherente con su discurso de la tibieza, que de todas formas a la luz de las Escrituras que deben ser norte y guía de un creyente cristiano, causa nauseas.
Si, los profesores que ni siquiera actualizan sus clases, aquellos que caminan de espaldas al presente y al futuro, razón suficiente que apuntala el resultado de alumnos que no saben leer ni escribir al egresar del bachillerato, con escasos conocimientos y muy pocas destrezas, así continúan durante el proceso universitario, lo que nos ubica en el escalafón mundial en el ignominioso puesto noveno de los países más ignorantes del mundo. Esa lectura no la hacen los interesados ocupados en otros quehaceres no propios de su misión, porque quedan muy malparados la mayoría de ellos, que por múltiples causas desempeñan un rol pasivo escindiendo sus responsabilidades frente a la construcción social. Ay de ellos que escandalizan diría el Maestro.
Si, la falsa sabiduría que otorga los conocimientos precarios, porque muchos creen que adornados de títulos, aparentemente “más preparados que yogurt” pero sin honrar el deber de investigar, leer la historia, no sólo de su micro-mundo, además del macro-mundo que impone la aldea global, acudiendo a fuentes fidedignas y confiables, asumen posiciones agresivas y guerreristas, siguiendo un discurso incendiario, resentido y vengador, del mayor camaleón en este proceso electoral agobiante. Irónicamente se autodenominó su grupo de seguidores más cercanos “los decentes”, todos apostando en contra de los seguidores del NO en el plebiscito, deshonrosamente desconocido por quien había empeñado la palabra y el grupo de áulicos cercanos, con la complacencia de los lejanos, que se erigieron como defensores del SI a la paz desconociendo, que los otros, lo que no aceptaban, era la impunidad más grande que se ha venido implantando y que se ha demostrado que todo lo que desmentía el Presidente frente a lo acordado en la Habana, se ha venido cumpliendo “en cómodas cuotas mensuales, pero con financiación”, por la deuda que heredaran todos los colombianos al comprometer recursos del erario público de manera desaforada.
La discusión no era en torno a la paz, lo era sobre la impunidad, porque el pretendido que se ha experimentado, es el desconocimiento de valores fundamentales y la afrenta a la institucionalidad. Los del NO, querían y quieren la paz, mas no, reitero, la impunidad. Todo ello confluyó a la hoy innegable polarización, la mas de las veces ofensivas, esto es una guerra simbólica, posicionando entre uribistas y la otra parte que cambia de apellido ya en el estertor del gobierno Santos, quien prefiere los últimos respiros dificultosos en el exterior, posando de gran líder triunfador para las cámaras internacionales de quienes, incluso colombianos, creyeron y aún creen, que las insurgencias en este país de las bananas lo que han hecho fue mejorando el estilo de Robin Hood, pero con el adicional de haber servido y seguir sirviendo a las mafias del narcotráfico. La narcotización continúa y por ello nadamos literalmente en coca según fuentes debidamente documentadas.
Por lo anterior comprendo lo distante de asumir banderas de una causa, frente a la realidad de sus ideas y obras de personas que no representan la virtud en ningún campo de la vida, sea la esfera pública o la privada, pues día a día, por la oportunidad impensable en mi lejana juventud de conocer el pensamiento fluctuante e incoherente de personas en tiempo inmediato y real a través de las redes, encuentro significado al tango “cambalache”. Compleja tarea, sin desconocer que el libre albedrio es valioso bastión del ser humano, pero el unanimismo de los cantos de sirena es detestable, cuando aglutinan a tontos doctos arrogantes e ignorantes. Ahí es donde poco a poco se pierde la capacidad de asombro, cuando la lectura arroja como resultado esas monumentales contradicciones, las que asumen personas supuestamente creyentes, respetuosas de valores y principios no negociables, al declararse seguidores del camaleón que acude a la santería o al chamanismo, en contravía de la ideología cristiana común a todos los seguidores de Cristo, incluyendo los católicos, quizá fruto equivocado y producto si, al depositar la confianza en los intelectualoides ignorantes, avalados por los cartones que reciben en las cunas del saber, párvulos ignorantes que huyen de la investigación critica, que desprecian la sabiduría popular rebosada de más valor.
En días pasados escuché a la vendedora en un almacén de telas en Bucaramanga, de unos cincuenta años aproximadamente, a duras penas bachiller. Con esa sinceridad, desparpajo y lenguaje recio de las santandereanas, me dio una clase concisa de igualdad e igualitarismo. Sentada como buena alumna escuché mientras ella cortaba las sedas y velos. La conclusión apuntó a que no podía darse a todos de manera igual, aduciendo por ejemplo que ella había tenido oportunidad de tener una vivienda propia, pero no había ahorrado gastando en cosas innecesarias, por tanto no podía esperar a que le regalaran una casa. Concluyó su sabia disertación con la parábola de los talentos, indicando a manera de colofón, que ella había botado su talento y no podía esperar recibir lo que otros habían trabajado multiplicando sus propios talentos. Fue una clase sosegada, pese al calor del medio día. Inmediatamente recordé el pensamiento de Santo Tomás de Aquino mi patrono universitario en torno a la justicia: ” dar a cada uno lo suyo” donde juega un papel primordial la voluntad, como una constante frente a los demás. Una clase de filosofía del derecho, mezclada con el pensamiento del cristianismo lógico, jamás fanático.
Unos días después leo a una inquieta y juiciosa abogada, apuntar en el Facebook que, había existido fraude, basada en las noticias leídas fuera de contexto y quizá en las fotos incompletas de algún congresista electo, que basó su campaña en la promesa de que “mandaría a Uribe a la cárcel”; ambos, la abogada y el neocongresista, sin tener las pruebas suficientes, sin ahondar en el origen de las noticias, sin conocer la realidad, erigiéndose como jueces en esta patria llena de ignorantes, aportan su grano de arena para mayor arraigo de la desinformación. Peor aun cuando aducen que miran el espejo retrovisor. ¿Cuál espejo, el que no han limpiado y por ello perciben borrosas imágenes. Esto corrobora el ranking mundial, que merecidamente lo hemos logrado por la falta de compromiso de muchos, que se empecinan en señalar sin conocer la verdad, al menos una parte minúscula de ella, porque la verdad absoluta no es posible, pero así sea un átomo de ella para bien de la sociedad.
Hoy mientras conducía en esta ciudad de la eterna primavera, escuché al camaleón decir con la seguridad más absoluta, a través de un medio radial, que la Constitución de 1991, había sido escrita por el M-19. Que gran embuste, como dicen en la Costa Caribe. Esta Carta Constitucional, basta con ir a google como señalaba el candidato profesor y encontrar que fue producto de una Asamblea Constituyente, integrada por representantes de todas las vertientes políticas presentes en el país de entonces.
Soy abogada, más no psiquiatra, pero por el ejercicio de mi profesión, me vi obligada a estudiar las patologías psiquiátricas para entender algunas situaciones particulares en unos procesos. Me atrevo osadamente a afirmar que además de sufrir el candidato camaleón cuadros psiquiátricos muy concretos, como cuando se ha equiparado a Luis Carlos Galán, a Moisés, Jorge Eliecer Galán, incluso a Jesucristo y ahora retomando el pensamiento de Álvaro Gómez Hurtado, este último que fuera víctima del secuestro de su grupo armado (M19), sufre de una mitomanía llevada a los extremos. Otra tesis sería, que está abusando de la ignorancia de los colombianos. Cualquier posibilidad produce nauseas.
Finalmente, el camaleón y sus muy doctos seguidores no pueden asumir un discurso, un argumento sin señalar al expresidente Uribe destilando odio. Advierto, no soy uribista, mas por ello, no puedo dejar de reconocer los alcances durante su gobierno, que heredó los espantosos vicios de los gobiernos anteriores. De otro lado comprendo, es un ser humano con errores como todos los seres humanos, pero no por ello puedo descalificar los grandes logros de él y de quienes son sus seguidores, por ejemplo de una joven profesional antioqueña, que tras serios debates en el Concejo de Medellín, ha demostrado las grandes y graves falencias estratégicas, económicas y políticas por los negocios mal orientados en EPM, la venta de ISAGEN etc. Esta joven concejal se llama María Paulina Aguinaga Lezcano, quien dejó en stand by el estudio de su doctorado en Harvard, después de trabajar al servicio de la ONU en países africanos, para servir a los intereses de Medellín. ¿Acaso, a mi edad puedo desconocer el valor de esta profesional por ser del Centro Democrático?. ¿Acaso por formar parte del partido político liderado por el expresidente Uribe, debo satanizarla?. ¿Es posible en una democracia, creer que todos los seguidores de Álvaro Uribe son sus títeres?. ¿En igual sentido satanizar, porque los líderes de la izquierda así lo decidieron a Iván Duque? La razón, mi sentido común debidamente informado, me indican que no.
Prosigo en las preguntas al estilo de la mayéutica ¿Acaso ser joven resulta ahora un pecado, para los mismos jóvenes conducidos como borregos, ausentes y desconocedores de nuestra historia?. Ni siquiera saben hacer una lectura matemática del resultado electoral de la primera vuelta de las elecciones presidenciales confrontado con los resultados de las elecciones para el Congreso, a fin de concluir que el caudal de votos depositados a favor de Duque Márquez, superó con creces los resultados de las listas del Centro Democrático. La sinrazón, la ilógica, los engaños, los cantos de sirena, son el fuerte a derrotar en la segunda vuelta. Sin duda itero, parte del fenómeno de descalificaciones grotescas, del discurso repetido de señalamiento de enemigos de la paz a quienes no se convierten en feligreses de ”la nueva iglesia de la izquierda”, donde prohíben votar por otros, cercenando el libre albedrio o la libertad de autodeterminación, es consecuencia de los doctos ignorantes envanecidos en sus “conocimientos”, producto y consecuencia las mas de las veces de los profesores que no han atendido el deber de enseñar y guiar a sus alumnos a la investigación, al estudio, razón por la cual una masa informe, sin sentido crece, presa de la desinformación, que conducirá al caos a varias generaciones sin disciplina, que permitirán que el país siga anclado en el subdesarrollo, mientras repiten discursos preformados como si fueran autómatas.