Barranquilla, 21 de julio de 2022.- En una decadencia absoluta entre mentiras y exageraciones, y robándose las ideas ajenas además de la presencia con vestimenta e ideas exóticas de algunos de sus nuevos miembros se instaló el nuevo Congreso que se presume que legislará por los pr+oximos 4 años a partir de este 20 de julio. Es así como se posesionaron los nuevos congresistas, además de elegir la mesa directiva que durante este primer año de legislatura presidirá por lo menos el Senado, porque en la Cámara de Representantes no se pudo hacer la elección.

Hasta las horas de la noche se prolongó la plenaria del Senado, luego de la reunión bicameral llevada a cabo en el Capitolio donde se procedió tomar el juramento a los congresistas, y luego en el recinto del Senado a escoger la nueva mesa directiva de la corporación que presidirá el trabajo legislativo entre 2022 y 2023.

En el Senado fueron elegidos como presidente el controvertido senador Roy Barreras, Miguel Ángel Pinto, primer vicepresidente y Honorio Henríquez, segundo vicepresidente quienes fueron elegidos en una lista única y postulados por todos los partidos, salvo el ahora senador Rodolfo Hernández quien se negó a postular a nadie o a referirse a las postulaciones. Así mismo el Congreso reeligió Gregorio Eljach y a Saúl Cruz, como secretario general y subsecretario general respectivamente.

Y decimos que decadencia por el espectáculo y la gritería por parte de la miembros de la bancada de la extrema izquierda, y por qué no decirlo? provocada por el presidente Iván Duque de quien no solo la izquierda sino cualquier colombiano está cansado de escucharlo vanagloriarse todo el tiempo del falso cumplimento del 90% cuando realmente a los colombianos que votaron por él los desconoció gobernando con la izquierda, además de pasarse por la faja las promesas con que los engrupió y les mintió en campaña para que votaran por él. A Iván Duque la izquierda no le agradece su esfuerzo por mantener a las Farc, a los únicos realmente para quienes gobernó. Pero esto no le ha sido suficiente a Iván Duque, sino que además se salta la ley cada vez que le da la gana, tal cual lo hizo desde el inicio de su último iscurso, y durante su intervención en el Congreso.

Sin embargo, esto no fue todo, también como es de esperarse el senador Roy Barreras para dárselas de célebre y para además pretender aires de dignidad señaló que en adelante ya no se les llamará a los congresistas “Honorables”, sino ciudadano, y es que él mismo sabe que el “honorable” le queda grande tanto a él como al 90% del Congreso. Pero lo que sí hizo con toda falta de vergüenza fue robarse la idea del primer ministro de Sri Lanka quien la semana pasada a raíz del golpe de estado por parte del pueblo contra el mandatario, dijo que quien ocupe el cargo de presidente en adelante no se le llamará “su excelencia”, sin embargo, a quien llaman “la rata roy” en las redes sociales no citó al primer ministro de Sri Lanka, sino que sin ninguna vergüenza se apoderó de la idea.

¿Y qué decir de todo el resto izquierdopata nuevo y antiguo que conforma el Congreso? El otrora recinto sagrado ahora cuenta con masculinos en zapatillas de mujer, y mujeres que al parecer no estarían acostumbradas a calzar zapatos.

Otros como el represente del Valle Alejandro Ocampo, con zapatos, según él hechos a base de marihuana al igual que chaquetas y vestidos cuya materia prima es el plástico, razón por la que se proponen legalizar la marihuana, la coca y toda una serie de materia prima de la perdición, además de los crímenes y actos violentos que provoca el negocio del narcotráfico. Sin embargo, nada de esto al parecer sería importante para estos nuevos “legisladores” que en un acto sin precedentes llevaron chocolates, cervezas, bebidas, que distribuyeron en el recinto del Congreso haciendo lobby entre sus compañeros para legalizar no solo el negocio sino regular el consumo de la droga.

Al igual que otros quienes no escatiman en gastos a pesar de su falsa defensa de los más necesitados, discurso que mantienen en la punta de la lengua para cautivar ingenuos mientras no obstante exageraron con la vestimenta para acudir al acto, como el caso de la representante Katherine Miranda quien lució un vestido de Carolina Herrera y se postró sobre la alfombra roja que otros más soberbios que ella ya habían pisado.