COSTA NOTICIAS

No quieren leer bien lo que dijo Trump sobre Petro. Por: Eduardo Mackenzie

Parece que algunos importantes diarios de Colombia tienen dificultades para entender lo que escribió Donald Trump en Truth Social sobre Gustavo Petro. Hay como un intento de eclipsar ante el lector medio la caracterización precisa que redactó Donald Trump sobre Gustavo Petro.

Un diario de Antioquia escribió ayer 20 de octubre: “El presidente de EE. UU. lanzó duro pronunciamiento sobre el narcotráfico, señalando que Colombia ha sido históricamente un productor de sustancias ilícitas y que la situación se agravó con la administración actual”. Falso.

El diario antioqueño trata el tema de manera curiosa: como si Trump acusara a Colombia y a los colombianos y no al individuo que ocupa la Casa de Nariño. Ese diario o no leyó bien el texto de ayer de Trump en su cuenta en Truth Social, o lo leyó muy bien y decidió que más vale atenuar lo que Trump dice sobre el ocupante de la Casa de Nariño (“es un líder del narcotráfico que incentiva la producción masiva de drogas”).

Sin embargo, ese ejercicio de súbito pudor ante el honor perdido de Gustavo Petro no es digno de un gran diario de Colombia. Pues para hacer ese lavado de cara, esa publicación opta por echarle el agua sucia a Colombia, si no a los colombianos, y no examinar los alcances de la caracterización de Donald Trump. En realidad, el presidente americano no se refirió a Colombia como país ni a los colombianos.

Trump no culpó a Colombia por el auge tremendo del narcotráfico, ni dijo que “Colombia ha sido históricamente un productor de sustancias ilícitas”. La palabra “históricamente” no aparece en el texto de Trump en Truth Social. Ese matiz es un invento del articulista del diario cuyo nombre olvidé en este momento.

Allí el punto exclusivo es, por el contrario, el personaje Gustavo Petro, el mandatario colombiano, su política general y su responsabilidad, y no la historia de Colombia.

Otro importante diario, esta vez de la costa Norte, sugiere que el problema no es cómo ve Washington a Gustavo Petro sino los nuevos aranceles que decidió el presidente estadounidense respecto de Colombia. Ese es otro intento despistador flagrante.

Eclipsar el tema central, la declaración devastadora de Trump sobre Petro, y sustituirlo por un punto secundario es una forma inaceptable de informar.

Poco conscientes del sentido de las palabras y, sobre todo, del peso de éstas en los titulares de prensa, en la coyuntura actual de crisis política, esos diarios parecen ceder a la tentación de desviar el sentido de lo dicho por el jefe de la Casa Blanca sobre el señor Petro. Un muy respetable diario del norte de Colombia escribe este titular: “Son una máquina de fabricación de drogas: Trump sobre Colombia tras anunciar aranceles”.

Es decir, el aumento de aranceles para Colombia es la respuesta de Trump a lo que hace Colombia como “máquina de fabricación de drogas”.

Así desaparece en el titular la demoledora caracterización sobre Petro y su administración. Y el problema resulta ser no Petro sino Colombia como “máquina de fabricación de drogas”. Y volvemos al problema inicial: en el texto de Trump no aparece ni una sola vez la palabra “máquina de fabricación de drogas” ni “aranceles”.

El mismo día, el mismo diario, continuó su extravío al reiterar que el “duro golpe para toda la economía” no ha sido la política de Petro, destructiva del tejido económico, industrial y social del país, sino el asunto de los aranceles: “Sectores políticos afirman que el aumento de aranceles por parte de EE. UU. es un ‘duro golpe para toda la economía’”.

Otro diario ve en la frase sobre Petro, no un acto político bien meditado de Washington sino un desliz retórico de Trump, algo así como una rabieta de Trump que no tendrá fuertes consecuencias. Según ese matutino, el presidente de Estados Unidos habría dejado atrás “la paciencia que había tenido en ocasiones anteriores” y “arremetido” contra Petro por sus insultos y provocaciones de estas últimas semanas. Es decir, la caracterización que le ha dado la vuelta al mundo no es una cosa seria sino una objeción sin consecuencias mayores.

Ese diario escribe: el mandatario norteamericano “afirmó que Colombia ha convertido este negocio en el más grande del país y Petro no hace nada para detenerlo, pese a los enormes pagos que recibe de Estados Unidos”. Corrección: Trump no dice eso, no dice que “Colombia ha convertido este negocio en el más grande del país”. Y está en lo cierto. No fue Colombia la que inventó la producción y tráfico de drogas alucinógenas, sino grupos específicos de criminales, locales y extranjeros, que han victimizado a Colombia durante décadas.

El presidente Trump dice que Petro “es un líder del narcotráfico que incentiva la producción masiva de drogas, tanto en campos grandes como pequeños, por toda Colombia” y que eso se ha convertido “en el mayor negocio de Colombia”.  Trump en Truth Social no acusó a Colombia, acusó a los narcos, a Petro y a su política de no hacer nada para detener el narcotráfico, “a pesar de los pagos y subsidios a gran escala de EE.UU.”.

Ayer, en el cubrimiento de esa noticia aparecieron esas diluciones de sentido que para un lector atento cuentan mucho. Pues de ese tipo de manejos se sirven los tiranos para confundir a la opinión y escapar a las acusaciones más pertinentes.

A bordo del Air Force One, Trump dijo que Colombia tiene un presidente “lunático” que “no dirige ninguna lucha contra las drogas” y que los narcos “son una maquinaria de fabricación de drogas”.

Desde 2021, Hugo Armando Carvajal, alias “el Pollo”, ex director de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) de Venezuela de 2004 a 2011, está revelando los detalles más sórdidos del Cartel de los Soles y del papel del chavismo-madurismo y de las FARC en el narcotráfico destinado al mercado estadounidense y europeo y al financiamiento de partidos de izquierda en varios países. Comenzó sus confesiones ante jueces en Madrid en 2021 y después las continuó ante el fiscal federal Damian Williams, desde 2023.

¿Alguien puede creer que las conclusiones de Trump sobre Gustavo Petro no descansan sobre numerosas informaciones y pruebas judiciales?

El ministro colombiano Luis Gilberto Murillo elaboró una respuesta y adoptó el estilo vociferante de Maduro: calificó las declaraciones de Trump como una “amenaza directa a la soberanía nacional al proponer una intervención ilegal en territorio colombiano”. El secretario de Defensa, Pete Hegseth, replicó: el submarino atacado navegaba en aguas internacionales, en una zona donde el Comando Sur de Estados Unidos realiza operaciones antinarcóticos.

Si las cosas siguen así, si la prensa más influyente sigue relativizando los hechos para lavarle la cara a Petro echándole el agua sucia al país en su conjunto, no queda duda: el petrismo y su línea de destrucción sistemática del país saldrá airoso del mal paso en que se encuentra, y se presentará con sus mejores ropajes ante el electorado copiosamente desinformado por su propia prensa nacional.

Comparte esta entrada:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore
Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore