Mi presencia en Colombia no es otra que la de un humilde compatriota preocupado por el futuro de todos.
De ninguna manera quiero aparecer como quien es el dueño de la verdad y la solución.
Por el contrario, vengo a buscar consensos para que encontremos la verdad y la solución entre todos.
En ese orden de ideas he venido trabajando en programar una reunión entre los líderes de las diferentes organizaciones de reservistas con un solo propósito:
Determinar el día y lugar para la Gran Convención de las Reservas de Colombia.
Esa convención tendrá dos objetivos:
– Organizar la creación del Partido Único de las Reservas.
– Escoger democráticamente a los líderes del partido y a los candidatos que votaremos todos en las próximas elecciones.
Me han llegado cantos de sirena para promover salidas extraconstitucionales aprovechando la debilidad actual del gobierno.
Ante esos cantos de sirena respondo:
Cualquier salida extra constitucional es inducida por la “caterva de descastados” que quieren regresar al poder cabalgando sobre nuestras espaldas.
No podemos hacerles el juego.
Colombia no necesita más de lo mismo.
Más de lo mismo, no es la solución.
Colombia necesita con urgencia un partido nuevo y limpio, no contaminado de ineptitud, corrupción e indolencia, conformado por líderes comprometidos, honestos y capaces.
Por primera vez en nuestra historia republicana, la sociedad civil está percibiendo a las reservas de las Fuerzas Armadas como una solución real.
No los defraudemos entregando nuestras banderas a los mismos politicastros de siempre que nos llevaron a esta situación actual.
La debilidad del gobierno debe ser aprovechada para convertirnos en alternativa, no para devolver el poder a los que lo han usufructuado en su provecho y en desmedro de todo el resto de colombianos.
Para su gentil reflexión y acción.