Barranquilla, 21 de septiembre de 2022.- La Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia anunció este martes la medida de aseguramiento y orden de captura dictada en contra de su expresidente, el exmagistrado José Leónidas Bustos quien huyó hjacía Canadá luego de que oliera el tocino y a tiempo salió del país.
La orden de captura contra el viejo comunista corrupto a quien han considerado el Jefe del Cartel Criminal de la Toga que vendía y por otro lado engavetaba las investigaciones y los fallos judiciales, se da dentro del proceso que cursa en su contra como presunto autor de los delitos de concierto para delinquir, cohecho propio y tráfico de influencias de servidor público, relacionado con su presunta participación en el ‘Cartel de la Toga’.
La Corte mucho tiempo después ahora se pronuncia manifestando haber encontrado responsable al bandido y advierte que Bustos habría recibido múltiples dádivas para intervenir favorablemente en procesos que cursaban contra los excongresistas Musa Besaile y Álvaro Ashton. Recordemos que este delincuente con toga y birrete también se prestó para el falso acuerdo de paz con las Farc que hoy día tiene sentados en el Congreso de la República a los peores criminales del país.
Dice textualmente un documento de la Corte “Aunque el acusado no fue ponente en los casos de estos dos Senadores, existen elementos probatorios que permiten inferir razonablemente su participación en la empresa criminal dado el liderazgo que, según Moreno Rivera, ejercía en el seno de la Sala de Casación Penal”.
Según las delaciones del exfiscal anticorrupción, Luis Gustavo Moreno, Bustos recibió 200 millones de pesos como anticipo de Álvaro Ashton. También habría recibido de Moreno un reloj Cartier referencia “Ballon Bleu” avaluado en $42.969.977, que los dos compraron en el Centro Andino.
Según el expediente, Bustos también habría adquirido vehículos Dodge, Journey y BMW 523i, por sus gestiones con Moreno.
La Corte advierte que “existen serios y graves motivos que hacen pensar fundadamente en la probabilidad de que el acusado Bustos Martínez pueda interferir en el eficaz y cabal desarrollo de la actuación y de este modo obstruir la práctica probatoria y la justicia”.
Como expresidente de la Corte “tuvo la posibilidad discernir en el nombramiento o postulación de altos funcionarios como Magistrados de Tribunales, Fiscal General de la Nación, Magistrados del Consejo Superior de la Judicatura y de la Corte Constitucional y otros servidores, todos con ascendencia en la Rama Judicial, hasta el punto de ostentar un inmenso poder y reconocimiento que actualmente podría utilizar para injerir a su favor en el proceso u obstaculizar su normal desarrollo o la labor de los intervinientes en la actuación o interferir en la práctica probatoria“.
La orden de captura contra Bustos también se basa en una decisión de la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes, que acusó a Bustos, y a informes del entonces fiscal Néstor Humberto Martínez que, en el marco de la cooperación judicial con autoridades de Estados Unidos, “recibió evidencia recolectada dentro de la investigación federal 17-20516 de la que al parecer se infiere la posible comisión de actos de corrupción por parte del exmagistrado”.