
Valledupar, 27 de octubre de 2024- La consulta interna del Pacto Histórico dejó claro quién conserva hoy el control político dentro de la coalición de gobierno, Iván Cepeda. Su triunfo, con más del 64 % de los votos, lo posiciona como el nuevo referente del progresismo, heredero natural del petrismo, pero con un estilo más sobrio y doctrinario. Sin embargo, más allá de la victoria individual, el resultado refleja una izquierda que llega dividida y desgastada al umbral del nuevo ciclo electoral.
La posibilidad de que la izquierda mantenga el poder en 2026 es incierta. Iván Cepeda representa continuidad ideológica, pero enfrenta un contexto político adverso, desgaste de gobierno, división interna y pérdida de confianza ciudadana. El Pacto Histórico llega sin la misma fuerza movilizadora de 2022, y el liderazgo de Petro ya no cohesiona como antes.
Sin embargo, la izquierda conserva ventajas, una base fiel en sectores populares, presencia territorial consolidada y un discurso social que aún conecta con parte del electorado inconforme. Si Cepeda logra diferenciarse de los errores del actual gobierno, moderar su tono y construir alianzas con el centro, podría mantenerse competitivo. El verdadero desafío no será la derecha, sino la abstención y el desencanto.





